Se apaga el fervor patrio
Adquisición telúrica de Monsanto por Bayer
El ocaso de los campesinos de Estados Unidos y el mundo
Cumbre en Venezuela
Proyecto inmobiliario divide a Belgrado
Zapatos nuevos
De mercados, ahora sí en serio
Recuerdos XXXVI
En la novillada inaugural, ¡Miguel Aguilar!
Cuidado con las escuelas
o ha habido, desde el triunfo de la revolución cubana en 1959, un periodo en que las relaciones entre el gobierno de la isla y el estadunidense hayan sido menos hostiles que las actuales. No es que las autoridades de La Habana y las de Washington hayan hecho a un lado sus diferencias y atraviesen ahora por una etapa de fraternal camaradería o tan siquiera de amistosa concordancia; pero si se recuerda el trato que se dispensaron a lo largo del último medio siglo, que ha oscilado alternativamente entre un helado distanciamiento y un encendido encono, cabe pensar que la normalización de los vínculos políticos, económicos y sociales entre las dos naciones ya no es una quimera.
Informe del desarrollo 2015, antítesis del presidencial
erivado de la incapacidad del sistema económico de aumentar la riqueza, y distribuirla mejor, así como la persistencia de la pobreza
, es imperativo difundir el Informe del desarrollo en México 2015, en una cobertura amplia que rebase la intelectualidad académica y actores políticos. Por ello, en primera instancia es obligado criticar y reflexionar profundamente para resolver los problemas del desarrollo, mediante la exigencia al Estado de rendición de cuentas y transparencia.
ntrampados y sin salida, pero sin Jack Nicholson que nos alegre el tránsito. Largos, demasiados años de recesión y pérdidas de empleo en Europa y en Estados Unidos han definido un panorama sombrío y han servido de caldo de cultivo para las peores iniciativas políticas imaginables: racistas, discriminatorias, aislacionistas y de odio. A eso le llaman ahora populismo
que los medios convierten en el enemigo principal, sin respeto alguno por el detalle, el origen, de esas movilizaciones. Al generalizar sin mediación alguna, los cruzados del anti populismo pueden llevar a grandes equívocos en el trazado del urgente mapa político para salir del embrollo.
onald Trump cometió un error grave al inicio de su campaña. Acusó a México de enviar a su peor gente y a los mexicanos de ser asesinos, violadores y traficantes de drogas. El error radica en el nombre y el apellido: se refiere a todo un pueblo, a sus vecinos y socios comerciales.
a hemos visto, y lo seguimos viendo a diario, que el endrogamiento y los mayores préstamos que el gobierno solicita van a costa de la mayoría de los mexicanos.
n un mundo como el actual, tan interrelacionado, tan sometido a la dictadura del capital financiero internacional y dependiente del cambio climático y de la catástrofe ecológica engendrada por el capitalismo, el provincialismo y la creencia primitiva de que el país es una entidad aislada, como si estuviéramos en el siglo XIX, es una grave señal de autismo político. Por el contrario, es de sabios ver lo que sucede en otros países similares y aprender de la experiencia ajena.
os mexicanos son par a Donald Trump lo que los judíos eran para Hitler: violadores, traficantes de drogas, asesinos, una degenerada raza criminal que debe ser arrestada y deportada para preservar la pureza de los estadunidenses y la mera existencia de la patria.
istintos universos se viven en un recorrido por Tuxtla Gutiérrez, Chiapa de Corzo y San Cristóbal de las Casas, ciudades de Chiapas, uno de los estados más ricos en cultura y recursos naturales de México. En una visita para impartir conferencias en corresponsalías del Seminario de Cultura Mexicana, visitamos primero la cálida Tuxtla Gutiérrez. No obstante que su origen data del siglo XVI su aspecto es moderno. La presidenta de la sede local del Seminario, la gentil poeta Socorro Trejo, con muy buen tino escogió como sede de la plática el museo de la Marimba.
os dos pedazos de la foto están pegados con cinta invisible. Las manos de Roberto, o tal vez la mías, rompieron en dos la fotografía. Es la única foto que tengo donde aparecemos él y yo. Debe haber sido tomada a fines de 1974 o principios de 75, durante los meses en que iba de visita
a mi departamento. Cierto, las visitas de Roberto Escudero duraban en ocasiones 15 días, mes y medio. Pero, tenía a bien precisármelo, no eran sino eso: visitas
. “¿Acaso de cortesía?, le pregunté. ¿Por qué no? Después de cada una de esas más o menos cortas estancias en Insurgentes, los amigos denominaban con el nombre de la avenida mi departamento ubicado en ella, Roberto se iba de mi casa sin despedirse. Las noches y días de insomnio, el desgaste producido por el delirio verbal de la embriaguez, los abusos a los cuales sometía su cuerpo y su alma, lo dejaban hecho pedazos. Al irse, su vida a mi lado se esfumaba de su memoria. Como si no hubiese tenido existencia, o como si esa existencia perteneciera a los espacios aéreos de la imaginación: se volatilizaban en su vuelo. Simples lagunas donde se hundían sus recuerdos y Roberto no iba a zambullirse en sus aguas fangosas para recuperarlos.
soberbiaactuación en El porvenir, de Marion Hansen Love