El mito de la capital segura
El transpacífico
Los chapitos
Desincentivar
ayuda
Meteorología y política
Huracán $4.16 por litro
Herrera: ceniceros y seguidores
La sucesión en la UNAM
Soluciones humanitarias no punitivas
¿Más consumo?
Cuentas alegres
Entidades federativas. PIB 2013
Las gringas
Nuevos tabús belgas
Johan Cruyff: la elegancia en el futbol
Sub-17, talento sin futuro
Donde habita la danza
n un sorpresivo viraje con respecto a los sondeos previos, en los comicios presidenciales realizados ayer en Argentina el derechista opositor Mauricio Macri (Cambiemos), actual alcalde bonaerense, estaba en un virtual empate con el aspirante oficialista, el ex vicepresidente Daniel Scioli (Frente para la Victoria).
Elogia concierto de Manzanero en el Cervantino
S
oy de Yucatán
, soy maya
, así se proclamó Armando Manzanero durante su actuación en el 43 Festival Internacional Cervantino de Guanajuato. Frente a un montón de paraguas e impermeables, el cantante interpretó sus grandes éxitos entrecortados por reflexiones y memorias de su vida, tan emocionantes como cómicas. Estuvo acompañado, en un estilo más jazzy que de variedad, por cinco excelentes músicos, que parecían subyugados de tocar con el maestro. En más de una ocasión, siguiendo la tradición jazzística, el saxofonista y el tecladista dieron un extra como solistas al público.
o sólo nuestro país, sino todas las democracias del mundo, cada cual con sus alcances y sus imperfecciones, debieran estar en alerta máxima, proactivas y no pasivas, ante la amenaza a los valores universales de la civilidad, la tolerancia y la concordia, que representa el excéntrico precandidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump.
Hace 20 años, la mañana del 23 de octubre de 1995, el jefe del Pentágono, William Perry, dijo ante la plana mayor del Ejército Mexicano que entre Estados Unidos (EU) y México existían fuertes lazos políticos y económicos, pero que faltaba un tercer vínculo
, el militar. A partir de entonces, promovida por Washington, la sana distancia entre las fuerzas armadas de ambos países comenzó a acortarse. Para justificar una mayor injerencia militar, la táctica estadunidense fue jalar de los hilos de la corrupción, el narcotráfico, el lavado de dinero, la deuda externa y los créditos condicionados del FMI y el Banco Mundial −como perros guardianes del Departamento del Tesoro−, con la finalidad de provocar una desestabilización de México.
as cabezas de la hidra capitalista se multiplican por todas partes, intensificando el despojo. Por todas partes se multiplican también las luchas de resistencia.
idel Herrera es el nuevo cónsul en Barcelona, un cadáver cuelga de un puente en Iztapalapa, linchan a encuestadores en Puebla, y el Poder Legislativo se apresta a dar jugosos regalos navideños a Coca-Cola, con la reducción del impuesto sobre el refresco, y a Televisa, con el aplazamiento del apagón analógico
. Son signos todos de una enorme descomposición institucional que paso a paso va dejando desprotegidos a los ciudadanos mexicanos en su heroica lucha cotidiana por salir adelante y tener una vida digna.
e llovieron insultos por mi artículo del lunes pasado, donde comenté la corrupción que impera en la delegación Cuauhtémoc y el caos en las colonias Condesa y Roma. Lo menos que me atribuyen en algunos mensajes enviados a mi correo es que estoy al servicio de López Obrador y su partido, Morena. Que generalizo al criticar a quienes han gobernado dicha demarcación. Y que no mencioné otros graves problemas que afectan a los vecinos de ambas colonias y a la Cuauhtémoc en general.
raíz de la crisis financiera, y con un retraso claro, han aparecido en la escena política algunas fuerzas que mantienen una posición que de modo complejo representan alguna forma contestataria del funcionamiento del capitalismo. Una reacción al sistema sustentado en los enormes flujos de capital, el endeudamiento de gobiernos, empresas y familias, el gran poder de las instituciones financieras, el carácter oligopólico de muchas industrias, junto con mayor desempleo y subempleo y una creciente desigualdad social.
ony Blair vuelve a las andadas. Se disculpa, pero no por la guerra, sino sólo por la inteligencia
. Existen elementos de verdad
–lo que eso quiera decir– en la visión de que la aventura que él y George W. Bush emprendieron en Irak en 2003 fue la causa probable del ascenso del Isis. Existen algunos, supongo, que tal vez digan también que este hombre malvado comenzó una guerra regional que ha oscurecido por completo la tragedia de los palestinos, quienes siguen soportando la más prolongada ocupación militar de la historia moderna, ocupación que Blair no hizo nada por terminar después de ser escandalosamente enviado en misión de paz
a Jerusalén. Tal vez estaría de acuerdo en que existen elementos de verdad
en esa insinuación, pero lo dudo.
sistí en estos días a tres inauguraciones de actos culturales tan diferentes que hubiese podido creerme en países a la vez vecinos y distantes, entre los cuales se levantarían fronteras casi infranqueables, pues no hay pasaporte que valga.
ue puede haber en Marfa, Texas, que artistas y creadores van por esas partes de desierto dejadas de la mano de Dios a experimentar alguna clase de visión para enriquecer la historia o el cantar en que andan? El escenario del nuevo libro de Coral Bracho, titulado con el nombre de la localidad (Ediciones Era, 2015) es también el de Marfa Girl (2012), película de Larry Clark. En principio, las dos obras poco tienen en común; si acaso el paisaje desnudo, un cielo gigantesco, sombras largas y el suspiro de los trenes. Ya las fotografías que tomara allí Wim Wenders cuando rodó París, Texas (1983-1984) revelan la misma Marfa en medio de nada, al suroeste de Texas, con un no sé qué de México que se manifiesta en su desolación inmóvil entre ruinas de una modernidad que no llegó: letreros olvidados, calles polvorientas, un drive-inn vacío. Panoramas muy de Wenders, como los que también retrató en Australia, y recuerdan a los que encontrara Bruce Chatwin en Patagonia.
n el horizonte una larga línea de cielo nuboso y frío, cual cristales opacos, recibía a los aficionados, al inicio de la temporada invernal de corridas de toros en la Plaza México. Escenario colorido en los tendidos, contrastado con las nubes caminos de arena que se escapaban.