s impresionante la cantidad de eventos que distraen nuestro quehacer diario en esto de intentar analizar la situación política de nuestro país. Es importante no dejarse llevar por los distractores creados por los medios de comunicación que bloquean las conciencias de millones, no sólo en nuestro país, sino en el mundo entero.
¿En algo cambiará la situación en Gaza, en Ucrania o en Ecuador si confirman la pederastia del presidente de Estados Unidos? ¿Cumplirá el sistema de justicia de ese país en gestionar las demandas en contra de su primer mandatario para tranquilidad popular?
La mayoría importante de la sociedad mexicana y gente consciente de la 4T, a través de los poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial, aunque todavía no entran en funciones los nuevos magistrados, pero ya se han manifestado, buscan soluciones, alternativas y propuestas factibles para evitar los colapsos económicos, ambientales, sociales y políticos que nos amenazan diariamente.
Para ello necesitamos concentración. No es fácil en un ambiente de farándula, separar la politiquería del show mediático y la realidad de nuestro sistema político. Aun las llamadas benditas redes sociales
, con sus propuestas informativas diferentes al de algunos periodistas e informadores mañosos y adversarios al actual gobierno, tienen el riesgo de caer en la dinámica del periodismo inmundo.
Nos han distraído del inaceptable panorama bélico originado por los intereses económicos que rayan en el fascismo del gobierno de Estados Unidos, así como de los crímenes diarios que cometen Benjamin Netanyahu y su ejército cómplice contra el pueblo árabe del país que invadieron desde el 14 de mayo 1948. Las víctimas siguen aumentando y la distracción continúa con asuntos que, tarde o temprano, tendrán que aclararse, como es la relación del coordinador de la bancada morenista en el Senado de la República con un presunto dirigente criminal de la organización La Barredora en el estado de Tabasco.
Para interpretar claramente el panorama geopolítico actual, necesitamos información objetiva, lógica y veraz. Se ha mediatizado y desviado tanto la vida política de nuestro país que los titulares de los medios mañosos de información más bien parecen marquesinas del teatro burlesque.
Con la llegada de una posibilidad de transformación, las expectativas eran contar con un sistema informativo a prueba de manipulación neoliberal. Sin embargo, pocos son los medios con los que contamos que realicen profundos análisis críticos y conclusiones lógicas y propositivas. La era del pan y circo capitalista no ha desaparecido del todo. Nos corresponde a la ciudadanía cuidar que este pandemonio sea erradicado definitivamente de nuestra vida política. Merecemos un mundo informativo confiable y de mayor cobertura.
Podríamos empezar contando con nuestra propia tecnología, con nuestro propio sistema operativo y no depender de prestadores de servicios como Google, por ejemplo, y plataformas que sólo han saturado el ciberespacio, mientras la realidad, la ética y la verdad es lo de menos.
¿Ahora sí entendemos por qué el temor a la tecnología china? Las grandes empresas estadunidenses buscan detener el desarrollo de ese país porque saben que peligra su dominio multimillonario.
Si bien las grandes empresas han sido de innegable utilidad, tampoco se escapan de llegar a ser las grandes manipuladoras de la realidad.
Para nadie es un secreto que el gobierno de Xi Jinping, incluso los anteriores al mandatario chino, han buscado esa independencia de los sistemas operativos extranjeros. Buscan, por lo pronto, la autosuficiencia en el manejo de la comunicación masiva. Y, por supuesto, para la cultura china no existen obstáculos para avanzar, no sólo en sistemas de comunicación, sino en todo lo que sea ciencia aplicada.
Las especulaciones de Edward Snowden sobre el espionaje tecnológico no pasaron desapercibidas. Los gobiernos republicanos y demócratas, al fin y al cabo, están acostumbrados a catalogar a los chinos como espías consuetudinarios, por lo tanto, se creen con el derecho de espiarles. Pero desde que se conocieran las revelaciones del ex consultor de seguridad estadunidense sobre el programa secreto de espionaje de su país que incluía a otros gobiernos, como el chino, el asunto pasó a ser de urgencia nacional. Entonces, ¿a quién le creeremos? En resumen, todo mundo espía a todo mundo.
Pero el asunto no quedó en dimes y diretes. En efecto, China lanzó un sistema operativo para tabletas, teléfonos inteligentes y computadoras que, según Pekín, ha sido totalmente desarrollado en China
. Y lo hemos comprobado, ¿qué marca es tu celular?
Finalmente, ya se ha declarado en foros mundiales, encuentros de científicos, en congresos ambientalistas, en reuniones sobre el desarrollo de la industria energética, en conferencias por la paz mundial… La ciencia se ha desarrollado para beneficio de la Humanidad y no pertenece a una persona, grupo, conglomerado industrial o tribu de millonarios. La ciencia avanza, independientemente de la posición política o gusto personal que los y las gobernantes del mundo manifiesten.
Nadie tiene el derecho de vetar a ningún desarrollo científico si es para beneficio universal. Y, en ese contexto, nos oponemos a los intentos por bloquear y minimizar el avance nacional de la industria petrolera, de la eléctrica y, sobre todo, de la nuclear, venga de donde venga.
Para Ximena Guzmán Cuevas y José Muñoz Vega, la justicia llegará
Colaboró Ruxi Mendieta