Domingo 26 de junio de 2022, p. 17
Londres. El sistema ferroviario de Gran Bretaña quedó virtualmente paralizado ayer y los vuelos en Europa sufrían perturbaciones, especialmente en Bélgica y Francia, por huelgas en el sector del transporte.
Decenas de miles de trabajadores ferroviarios británicos volvieron a hacer huelga, por tercer día esta semana, para reclamar subidas salariales a fin de hacer frente a la inflación, que alcanza niveles récord en el país. El paro, que se realizó el martes y el jueves, es el más importante en tres décadas.
Estaba previsto que sólo circulara un tren de cada cinco y que la mitad de las líneas estuvieran cerradas, según el departamento de tráfico. Además, la circulación se limitó a entre las 7:30 y las 18:30 horas locales. También se prevén perturbaciones para hoy.
Steve Montgomery, presidente del Rail Delivery Group, que representa a los operadores ferroviarios británicos, aconsejó a los usuarios viajar sólo si es necesario
e informarse antes de hacerlo.
El sindicato de transportes RMT, que convocó esta huelga de tres días, exige alzas salariales acordes con la inflación y denuncia la perspectiva de miles de despidos
y el empeoramiento de las condiciones laborales.
En una economía moderna, los trabajadores deben estar pagados correctamente por su trabajo, beneficiarse de buenas condiciones y tener la tranquilidad de que no perderán su empleo
, dijo el líder de la organización, Mike Lynch.
Frente al aumento del costo de la vida, en toda Europa crece el descontento entre la población y la amenaza de más huelgas.
Los tripulantes de cabina de la aerolínea de bajo costo irlandesa Ryanair, de España, Italia, Francia, Portugal y Bélgica, organizaron una huelga este fin de semana en protesta por sus condiciones laborales.
En Bélgica, sólo 41 por ciento de los vuelos previstos de Ryanair despegaron ayer del aeropuerto de Charleroi, cerca de Bruselas; la aerolínea tuvo que cancelar 127 vuelos entre viernes y sábado, indicó a la agencia de noticias Afp una vocera aeroportuaria.