Lunes 4 de febrero de 2019, p. 18
De 45 maquiladoras de Matamoros, Tamaulipas, que estallaron en huelga el viernes 25 de enero, sólo en cuatro o cinco no se había alcanzado un acuerdo entre empresas y sindicatos, por lo que permanecen cerradas.
Sin embargo, la demanda de un incremento salarial de 20 por ciento, así como el pago de un bono de 32 mil pesos para cada trabajador de la industria maquiladora, se viralizó
a fábricas de otros sectores, como la planta de Arca (principal embotelladora de la empresa CocaCola), la distribuidora Leche Vakita y la purificadora Blanquita, a pesar de que sus condiciones laborales y los contratos que tienen son diferentes a las maquiladoras, reveló Rogelio García, dirigente local de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra).
Quisiéramos decir que ya estamos de salida, pero no lo vemos así
, expresó el dirigente en una entrevista radiofónica, y descartó que el problema se solucione esta semana. Incluso, sostuvo que también trabajadores del sector comercio, por ejemplo de supermercados, pretenden exigir los mismos incrementos.
Consideró que es comprensible
que ante el aumento salarial y el bono de 32 mil pesos que han logrado los maquiladores, ahora trabajadores de otras ramas productivas pretendan obtener los mismos beneficios aunque tengan contratos diferentes.
Luis Aguirre Lang, dirigente del Consejo Nacional de la Industria Maquiladora de Exportación (Index), ha insistido en que las huelgas estallaron por una mala interpretación y manipulación del Sindicato de Jornaleros y Obreros Industriales y de la Industria Maquiladora, así como por la falta de claridad de las autoridades federales y locales sobre el incremento de 100 por ciento al salario mínimo a partir del primero de enero.
Los dirigentes sindicales, dijo, asumieron que también tenían que incrementarse las percepciones de todos los trabajadores cuando en realidad el aumento sólo era aplicable para quienes ganaban el minisalario y representaban una minoría entre toda la plantilla del sector.
Rogelio García insistió en que ni siquiera las maquiladoras tienen capacidad financiera para cumplir con dichas demandas, porque sólo el pago extraordinario del bono para 45 mil trabajadores implica un desembolso conjunto por mil 450 millones de pesos, monto equivalente al presupuesto de muchas dependencias locales.