La organización civil Brigadas Internacionales de Paz (PBI, por sus siglas en inglés) anunció que propondrá a toda la comunidad mundial de defensores de derechos humanos como candidata a recibir el Premio Nobel de la Paz 2018, para destacar la labor que realiza ese gremio, en vez de enfocarse sólo en el trabajo personal de algunos activistas.

Hannah Matthews, coordinadora de comunicaciones de PBI México, explicó en entrevista que la meta de la propuesta es realizar una entrega simbólica del galardón a todas las personas que se dedican a promover y defender los derechos humanos, en el contexto de un año que ha sido especialmente violento para ellas.

“Pese a las declaraciones (de gobiernos) a escala internacional, sigue habiendo muchos riesgos para los defensores y falta de reconocimiento del aporte de su trabajo, sobre todo en algunos estados, donde hablan de ellos como si fueran criminales o personas que ‘se oponen al desarrollo’”, señaló.

Este escenario de criminalización, subrayó Matthews, se repite en todo el mundo y afecta particularmente a las personas defensoras de la tierra y el territorio, puesto que son ellas quienes se oponen a que los grandes grupos empresariales despojen a las comunidades de sus recursos naturales, cada vez más escasos a escala global.

Si bien es un fenómeno generalizado, la violencia contra activistas de derechos humanos presenta una situación muy preocupante en México, debido a la impunidad en la que quedan las agresiones, que pueden ir desde las amenazas hasta los ataques físicos, sin que haya sentencias en contra los responsables.

La representante de PBI alertó que el próximo gobierno del país debe comprometerse a dar protección integral a los defensores amenazados, lo cual no es sólo traer escoltas o chaleco antibalas, sino también tener la protección política de tu gobierno de esclarecer las razones de esa situación de violencia.