SuperTrump y el 2018
Transparencia reprueba otra vez a México
Se apaga El Sol
Claro que Peña debe ir con Trump
No a convalidar, sino a confrontar
¿Tratados Videgaray-Kushner?
Informar de negociaciones
Trump devasta
¿A qué va EPN?
¿Litro a 21 pesos?
Ante la incertidumbre y las movilizaciones, más información y diálogo
Fuera el fuero
Fin a la impunidad
Avance constituyente
n la forma y en el fondo, la agresividad hacia México del presidente estadunidense, Donald Trump, se acentúa día tras día. La orden ejecutiva de iniciar la construcción de un muro a lo largo de toda la frontera común, y la insistencia en que será nuestro país el que pague el costo de semejante obra, no sólo ratifican el grotesco chovinismo y la hostilidad del magnate neoyorquino, sino que refrendan sus modales groseros y la prepotencia que, por desgracia, habrá de caracterizar a la Casa Blanca en los próximos cuatro años.
Donald Trump: amenazas y hechos consumados
onald Trump, presidente de los Estados Unidos de América, continúa agrediendo, amenazando, ironizando e insultando a México y a las mexicanas y los mexicanos en vísperas de la visita oficial del presidente de México, Enrique Peña Nieto, a Washington DC.
n los próximos días, el presidente de México y algunos de sus secretarios de Estado serán los primeros en cruzar de manera oficial el muro, virtual hasta ahora, de la ignominia. Según anunciaron al pueblo, van decididos a defender la soberanía nacional, la independencia económica y política de México, así como toda su estrategia para mantener la apertura comercial y la globalización a cualquier costo si es necesario.
n 1989, Francis Fukuyama, que era entonces un funcionario de nivel medio del Departamento de Estado, publicó un ensayo titulado ¿El fin de la historia?, en el que planteaba que el colapso del socialismo era una discontinuidad histórica. Según él, el paradigma socialdemócrata
de la posguerra había sido sustituido por el paradigma de la democracia liberal. El pasado 20 de enero, Donald Trump se dirigió a los reunidos en la plaza frente al Capitolio para pronunciar su primer discurso como presidente de Estados Unidos, el cual pudo haber titulado El principio de la historia
, porque su intención era –y es– convencernos a todos de que con él se inicia una era de prosperidad y grandeza, un nuevo siglo dominado por la determinación de Trump de que su país sea el centro del universo y no mire más que por sus intereses, como si la historia de Estados Unidos hubiera sido otra cosa.
ste jueves 26 de enero, el primer tribunal colegiado en materia civil de la Ciudad de México tendrá en sus manos una resolución crucial e histórica para la salud de los mexicanos, y también para el futuro de la agricultura campesina y la alimentación mundial: se trata de mantener o no la suspensión al otorgamiento de permisos para la siembra de maíz transgénico en nuestro país. Esta suspensión se estableció el 17 de septiembre de 2013 gracias a una acción colectiva (53 científicos, campesinos, artistas y consumidores, y 20 organizaciones) que demandó a las principales empresas comercializadoras del maíz transgénico y las instancias correspondientes del gobierno federal por incurrir en faltas contra la biodiversidad y el interés público.
elitón Ortega, padre de uno de los normalistas de Ayotzinapa, declaró que la Procuraduría General de la República (PGR) ha ocultado información clave sobre el caso de Iguala, que no entregó datos a los padres de las víctimas ni al Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) sobre el uso de camiones de pasajeros para el tráfico de drogas, pese a que ya había antecedentes de ello
. Subrayó que las omisiones y los engaños
por parte de las autoridades han sido la constante
, (La Jornada, 24/1/17). En entrevista por separado, Alfredo Higuera Bernal, titular de la oficina de investigación del caso Iguala, dijo a La Jornada ese mismo día que no tendría elementos para afirmar si hubo algún ocultamiento (de información al Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes o a los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa).
l comenzar el año –en medio de tan deplorables augurios y acontecimientos de este lado del Atlántico–, cabría examinar el potencial de contagio en Europa con una breve y esquemática revista a tres coyunturas políticas nacionales, cuya evolución, en los próximos meses, puede ensombrecer más lo que ya apunta como otro annus horribilis. El electorado francés, que tantas lecciones de sabiduría política ha dado, parece inclinarse –como algunas voces advierten– a cometer error similar al de Estados Unidos: dar por supuesto que la opción de ultraderecha es no sólo repulsiva sino, en realidad, inelegible. Se piensa que, aun en el extremo de alcanzar la pluralidad en la primera ronda electoral, en la segunda sería derrotada de manera contundente. Ya ocurrió
–suele decirse. La complacencia, como demostró el fenómeno Trump, es la peor consejera. Del otro lado del Rin, cabe presumir que Merkel no habría optado por presentar una vez más su candidatura si el resultado electoral en aquel país hubiese sido diferente. Sabe bien que el desgaste por el ejercicio del poder toca incluso a los gobiernos en general bien valorados, en especial cuando la demagogia irresponsable de sus oponentes de extrema derecha echa mano de lemas que apelan, como la AfD, al chovinismo más extremo e irracional. Además, hasta la aparición anteayer de Martin Schulz, no había en la Gran Coalición un líder de recambio con estatura suficiente. Países Bajos y su Partido por la Libertad (el misnomer perfecto) ilustra un caso diferente, en más de un sentido. Podría, por la fecha temprana en que adoptará su decisión –la más inmediata de las que aquí se evocan– ser el desprendimiento que provoque el alud. Al día siguiente de la asunción de Trump, con espíritu festivo se reunieron en Coblenza los líderes de esos tres partidos, a los que se sumaron otros de semejante calaña, entre ellos la italiana Liga del Norte y el austriaco FPÖ. Reiteraron su convicción de que para Europa ha sonado la hora de los reclamos más retrógrados, envueltos en la retórica de un nacionalismo cochambroso. Así, tras la del Reino Unido el año pasado, en marzo, abril y septiembre podrán escribirse otras tres páginas quizá también deplorables para el destino europeo y global.
os planteos que ha hecho Trump a su llegada a la presidencia estadunidense confirman que su gobierno afectará negativamente el funcionamiento de la economía mexicana. Declarar que con esa administración no habrá confrontación, como lo ha hecho Peña Nieto, significa no entender que no depende de nuestro país la existencia de conflictos entre México y Estados Unidos. El nuevo gobierno de este país está decidido a cambiar las reglas del juego comercial. Los discursos con empresarios automotrices y de otras industrias ratifican que Trump castigará cualquier nueva inversión en nuestro país que sustituya procesos industriales que se llevaban a cabo en Estados Unidos. Además se ha propuesto revisar el TLCAN para que beneficie a su país, en detrimento obvio de la economía mexicana.
iendo en Telesur los discursos de los jefes de Estado y gobierno en la quinta Cumbre de la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe (CELAC), en República Dominicana, era inevitable pensar en Bolívar, San Martín, Martí, Fidel y Chávez, que soñaron y lucharon por ver unida nuestra región en una comunidad de naciones. Para decirlo con palabras de Martí en Nuestra América: andando en cuadro apretado como la plata en las raíces de los Andes
. Nada de unidad en el orden institucional se alcanzó en el siglo XX, como no fuera la OEA dirigida por los Almagros de entonces, como señaló en sus enjundiosas palabras el presidente Nicolás Maduro. La OEA sólo sirvió para validar injerencias, intervenciones armadas y golpes de Estado fraguados y orquestados desde Washington.