Predios irregulares ocupan mil hectáreas de áreas verdes: autoridad
Lunes 21 de marzo de 2016, p. 29
El crecimiento desmedido de los asentamientos irregulares y los desarrollos inmobiliarios han generado un acelerado deterioro del suelo de conservación en Tlalpan, delegación donde se localizan importantes mantos acuíferos de los cuales se extrae 60 por ciento del agua que se suministra a varios zonas de la Ciudad de México.
De acuerdo con Mario Camaño González, director de Ordenamiento Ecológico y Educación Ambiental de esa de- marcación, en esta zona sur no sólo se tiene una alta capacidad de filtración para alimentar el acuífero local, sino que juega un papel fundamental para la sustentabilidad de la capital por los servicios ambientales que provee, como una mejor calidad del aire y la regulación del clima, por lo que se llevan a cabo acciones para proteger y conservar ese tipo de suelo.
Entrevistado durante la Jornada Informativa y Cultural por el Derecho Humano al Agua, resaltó que Tlalpan se ha visto afectado de manera muy drástica
por los desarrollos inmobiliarios, que tuvieron su mayor crecimiento en las pasadas tres administraciones delegacionales, por lo que ahora se puso un ya basta
a todas aquellas obras que están al margen de la ley.
En el caso de los asentamientos humanos irregulares, comentó que suman 192, los cuales se han extendido y a la fecha ocupan más de mil hectáreas de suelo de conservación.
Sobre el tema, Gustavo Herrera, orientador ambiental en la Dirección de Educación Ambiental de esa misma delegación, comentó que es alarmante, preocupante
la velocidad con que en los pasados 20 años se ha perdido el suelo de conservación.
–¿Cuáles son las zonas más afectadas por esa pérdida?
–San Miguel Topilejo, San Pedro Mártir, Chimalcóyotl, Magdalena Petlacalco, San Miguel Xicalco y Parres, que han crecido a ritmos preocupantes.
“Al perderse suelo de conservación –enfatizó el funcionario– se destruyen zonas de cultivo, áreas arboreas, se incrementa la erosión, no hay filtración de agua y se incrementa la temperatura en algunas zonas, porque los árboles regulan el clima; entonces, cuando hay estas islas de calor empieza a haber incendios y se da una deforestación”.