La Biblioteca Francisco Xavier Clavigero de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México recibió en donación el acervo personal del jurista Néstor de Buen Lozano, integrado por más de 12 mil libros, revistas y fotografías.

El rector de la Ibero, David Fernández Dávalos, recordó que De Buen se desempeñó muchos años como abogado general de la institución y lo definió como una figura señera en nuestro país, en especial en materia de derecho laboral.

Agradeció al jurista y a su familia la donación y dijo que la universidad se compromete a conservar con afecto su biblioteca y ponerla al servicio de los jóvenes de hoy y de las futuras generaciones; de esta manera, el legado de don Néstor podrá seguir alumbrando a nuestros estudiantes, hombres y mujeres, para que sean personas igualmente de bien, comprometidas con su sociedad y con las libertades básicas del ser humano.

En la ceremonia que oficializó la entrega-recepción del acervo, Claudia de Buen expresó la dificultad de decidir el destino del patrimonio de su padre quien, con dificultades de salud, aún vive: “siendo egresado y profesor de la UNAM, investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la misma universidad, y profesor y abogado general por varias décadas de la Ibero, la decisión de a quién donar la biblioteca fue muy difícil, pero estoy segura de que hoy está en un espléndido lugar”.

Néstor de Buen nació en Sevilla, España, en 1925. Llegó a México siendo niño, con el exilio español en tiempos de Lázaro Cárdenas. Se formó como jurista en la UNAM y destacó en los campos del derecho civil y laboral. Su trabajo como docente comenzó en 1953, y en 1958 se integró como catedrático en la Universidad Iberoamericana. Desde 1985 es articulista de La Jornada.

Su hijo Carlos de Buen Unna compartió su satisfacción de que el acervo de su padre sea parte de la Ibero: La Biblioteca Francisco Xavier Clavigero es probablemente la mejor biblioteca que hay, por lo menos en una universidad privada, y a ella puede asistir cualquier persona y eso para nosotros es fundamental; esa es una manera de compartir ese legado de mi padre, porque esto, más que una donación, es una encomienda.