MENTIRAS TRANSPARENTES
Felipe Garrido
APENAS UN SUEÑO
Cuando el Gran Espíritu hubo creado los guajolotes, las chivas, los sapos, las alboradas, las mujeres, los capulines, los hombres y el tiburón, llamó al pavo real y le dijo:
–Ve por la Tierra y diles a las criaturas de los lagos y los ríos, las montañas y los mares, los llanos, las cañadas y las ciudades que nadie, nunca, morirá.
El pavo real iba despacio. Cada vez que amanecía o caía la noche o el arco iris era visible o llegaba a la orilla de un estanque, se detenía para admirar su cola y contrastarla con los colores que cubrían la tierra, seguro de que no eran tan bellos.
Luego el Gran Espíritu cambió de opinión. Llamó a la golondrina y le dijo:
–Ve por la Tierra y anuncia por lagos y ríos, montañas y mares, llanos, quebradas y las ciudades que todo lo que vive acabará por morir. Todo lo que hay en la Tierra pasará.
La golondrina en seguida surcó los aires y fue por todos lados para que todos supieran que la vida es apenas un sueño.
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