Comienza la Casa Blanca entrega de documentos del caso, solicitados por comité del Senado
Revela informe "vínculos profundos" entre el gobierno de Bush y Enron
Preocupaba al Ejecutivo el efecto económico de la quiebra, según reporte al que accedió Washington Post
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Washington, 24 de mayo. La Casa Blanca inició la entrega de documentos solicitados por un comité del Senado en relación con la investigación que sigue por los contactos entre funcionarios y ejecutivos de la firma Enron, publicó hoy The Washington Post.
Los documentos muestran que existían "vínculos profundos" entre la administración del mandatario estadunidense, George W. Bush, y Enron, e incluyen conversaciones entre el entonces presidente de la firma Ken Lay, y el asesor presidencial, Karl Rove, afirmó.
Según el rotativo, uno de los documentos revela que la asesora de política de Bush, Karen Hughes, habló con el secretario de prensa antes de la bancarrota de la empresa texana, en diciembre pasado, para determinar cómo manejar la reacción ante la prensa.
Varias semanas antes del colapso de la firma, el subjefe de gabinete Josgha Bolten discutió con un alto funcionario del Tesoro sobre cómo el fracaso de la corporación texana podría afectar a los mercados energéticos y financieros.
La cronología de estos hechos fue proporcionada por la oficina legal de la Casa Blanca al Comité de Asuntos Gubernamentales que preside el demócrata Joseph Lieberman, que emitió esta semana el primer citatorio oficial a la residencia ejecutiva.
La oficina ejecutiva del presidente Bush y la del vicepresidente Dick Cheney deberán entregar la documentación completa antes del 3 de junio próximo.
Hasta antes del citatorio, la Casa Blanca se había limitado a informar que personal de Enron se reunió en seis ocasiones separadas con Cheney o su equipo de colaboradores, entre el 22 de febrero y el 10 de octubre de 2001, pero había declinado ofrecer detalles.
Lieberman, cuyo comité inició la investigación de Enron desde enero pasado, había fustigado a la administración Bush por rehusarse a cumplir con lo que el legislador calificó como una "razonable petición" de información sobre los contactos.
Enron, una de las mayores empresas energéticas de Estados Unidos, se declaró en bancarrota a finales del año pasado, y generó no sólo la cesantía de miles de trabajadores, sino la pérdida de miles de millones de dólares de inversionistas y trabajadores.
Esta fue la más gigantesca declaratoria de bancarrota corporativa en la historia de este país.
Los documentos, a los que tuvo acceso el rotativo, muestran que la administración Bush estaba preocupada por el impacto potencial de la bancarrota, en especial en la economía, tras los ataques del 11 de septiembre pasado.
A pesar de que la administración Bush había presentado el caso como un problema ajeno al gobierno, los documentos reflejan que hubo extensas consultas entre el Consejo de Asesores Económicos y la Comisión Federal de Regulación Eléctrica (FERC).
Los documentos muestran que la administración Bush empezó a analizar el caso desde la toma de posesión presidencial, el 20 de enero de 2001, ante la posibilidad de que se convirtiera en un problema de relaciones públicas.
Pero de la misma forma, según The Washington Post, tampoco sugieren que la Casa Blanca faltó a la verdad cuando aseguró que no hubo ningún tipo de acción legal para rescatar a Enron, a pesar de que Lay era el mayor contribuyente personal a las campañas de Bush.
Las primeras revelaciones contenidas en los documentos ocurren en momentos en que la Casa Blanca ha sido puesta a la defensiva en una serie de asuntos domésticos, a unos cinco meses de las elecciones legislativas de noviembre venidero.
Además de la pesquisa sobre Enron, el Congreso busca averiguar el nivel de conocimiento previo de la Casa Blanca sobre los planes del saudí Osama Bin Laden y su red Al Qaeda para secuestrar aviones, así como las acciones oficiales para prevenir ataques.
Se espera que las averiguaciones congresionales de los casos de Enron, como del 11 de septiembre, se mantengan en la agenda política del Legislativo, en especial del Senado bajo control demócrata, a lo largo del año electoral.