Se presentaron acusaciones mutuas entre partidos

Alto abstencionismo hidalguense para renovar el Congreso; más de 60%

CARLOS CAMACHO CORRESPONSAL

Pachuca, Hgo., 17 de febrero. La jornada para elegir a 18 diputados de mayoría y 11 de representación proporcional se caracterizó por un abstencionismo que partidos y autoridades estimaron mayor a 60 por ciento, así como por incidentes menores, entre ellos retraso en la instalación de casillas y ausencia de funcionarios, lo que obligó que ciudadanos que hacían fila para votar se volvieran encargados de vigilar el proceso, en el cual contendieron 58 candidatos de siete partidos políticos.

Un ejemplo de la baja afluencia fue la casilla 4462 del municipio de Actopan, ubicada en la plaza principal, donde a las 13:20 horas apenas habían votado 70 de 568 posibles electores. Por falta de funcionarios la casilla se atendió con sólo tres personas, además de los representantes de partido.

Según datos del PRD, se instaló 97 por ciento de las 2 mil 763 casillas, aunque el Instituto Estatal Electoral (IEE) afirmó que fueron establecidas 99.6 por ciento.

Los partidos de oposición, principalmente el PAN y PRD, denunciaron que la tinta indeleble no fue tal, pues a los 15 minutos de haberse administrado "se borraba".

Durante la jornada los partidos emitieron acusaciones mutuas entre sí, unos de acarreo y otros de amenazas. También sobre una supuesta manipulación del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) para apoyar al PRI.

El Revolucionario Institucional aseveró que en Tulancingo, Manuel Bravo, padre del candidato perredista Ricardo Bravo Solís, recorrió por la madrugada comunidades con gente armada para amenazar a ciudadanos y obligarlos a votar por su hijo.

En respuesta, el dirigente estatal del sol azteca, Hipólito Ubaldo Vargas, dijo que "el padre de nuestro candidato murió hace dos años". Más tarde, el PRI reiteró su acusación en un boletín de prensa, en el cual indicó que incurrió en irregularidades un tío del aspirante.

El secretario general del Comité Ejecutivo Nacional del PRD, Jesús Zambrano, informó que la noche del sábado se dio la averiguación 12/SUBAE/20/2002, en contra del gobernador Manuel Angel Núñez Soto, a quien se imputó hacer proselitismo el 25 de enero a favor del candidato del PRI en Tulancingo, Fernando Pérez Ramírez, durante un acto de gobierno.

Zambrano añadió que se detuvo a seis camiones con utensilios para el hogar y propaganda, con las que pretendían comprar el voto en Tenango de Doria, Atotonilco el Grande, Huasca y Tula.

Marisol Vargas, presidenta estatal del PAN, señaló que en la televisión, durante el encuentro de futbol La Piedad-Pachuca, aparecieron spots en los que se invitaba a la ciudadanía a sufragar por candidatos del tricolor y del Partido del Trabajo.

No obstante, en el escenario del encuentro, el estadio de La Piedad, Michoacán, se desplegó una gigantesca manta de apoyo al candidato blanquiazul en Pachuca, Rodolfo Chavero.

En Pachuca, según la dirigente del PAN, a una cuadra de la casilla 889 de la colonia Morelos, se encontró gente que dijo votaría por el PRI, pues ya le habían pagado para ello, aunque no presentó pruebas. Aseveró igualmente que a las 13 horas no se habían instalado casillas en los municipios de Tula y San Agustín Metzquititlán.

Por su parte, Federico Hernández Barros, representante del PRI en el IEE, dijo que en la comunidad Temazcalapa, municipio de Tenango de Doria, un grupo de perredistas amenazó con cerrar la carretera. De igual forma, acusó que José Antonio Cuevas, funcionario del municipio de Pachuca, gobernado por el PAN, fungió como representante general de casilla, acción que prohíbe el artículo 36 de la Ley de Servidores Públicos.

Agregó que desde las 23 horas del sábado, en el distrito de Jacala, se vieron camionetas con vidrios polarizados y placas de Michoacán, en labores proselitistas a favor del PRD, al cual apoyó en una alianza de facto el Frente Democrático Hidalguense (FDH), que encabeza el ex senador priísta José Guadarrama Márquez.

Entre tanto el presidente del IEE, Jorge Arturo García Tavera, negó que hubiera retraso en la instalación de casillas y la ausencia de funcionarios. "Por el contrario, los funcionarios atendieron al llamado del instituto para esta jornada electoral", señaló.

Muy temprano, después de votar, el gobernador Manuel Angel Núñez Soto calificó como "perversidades" las acusaciones del PRD y el FDH en su contra, mientras que en otra casilla el ex senador Guadarrama Márquez calificó de desigual el proceso, "pues se echó mano de muchos recursos para favorecer a los candidatos del PRI".

El ex gobernador Jesús Murillo Karam dijo luego de sufragar que el PRI tenía tan cómoda ventaja que "de las 18 diputaciones en juego vamos a ganar 19".

Por la tarde, PAN y PRD insistieron en la inequidad del proceso y en una afluencia de votantes dispareja, que el PRI pretendía aprovechar para anticipar sus triunfos.

Sin embargo, todos los partidos en la contienda y el mismo IEE reconocieron que difícilmente se podría superar 35 por ciento de la votación. En 1996 llegó a 37 por ciento y en 1999, cuando la elección de diputados se empató con la de gobernador, la afluencia llegó a 52 por ciento.