Madrid. Medio centenar de mandos medios y altos del ejército español retirados y afines al régimen franquista difundieron ayer un manifiesto en el que exigen la destitución de Pedro Sánchez como presidente del gobierno, elegido antier por el Congreso de los Diputados para presidir el país en los próximos cuatro años.

En el texto, apelaron a supuestos principios morales de la defensa de la unidad territorial para exigir una intervención de las fuerzas armadas y del resto de las instituciones del Estado para derrocar al actual gobierno, elegido por las vías democráticas y constitucionales.

Mientras Sánchez cumplió en esta jornada con el protocolo oficial y prometió el cargo como presidente del gobierno ante el jefe del Estado, el rey Felipe VI, el grupo, sin mucha influencia en los estamentos militares actuales, rechazó el pacto parlamentario con varios partidos, incluidos algunos independentistas, que permitieron la relección del socialista.

Entre los acuerdos alcanzados figura la ley general de amnistía, que eliminará los procesos judiciales y las sentencias en curso a todos los militantes, simpatizantes y líderes del proceso de independencia unilateral catalán de 2012 a la fecha.

Denunciando la ausencia de justicia, igualdad y democracia en España. En la que el acoso al Estado de derecho, al copar el poder Ejecutivo la mayoría de los órganos judiciales, anula la independencia del poder judicial y la separación depoderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, como ya han aseverado diversas asociaciones de magistrados, jueces y fiscales, así como el Consejo General del Poder Judicial y el Tribunal Supremo, argumentaron los militares en retiro, que pertenecían a los estamentos de Armas y Cuerpos.

Advirtieron de “la posible ruptura de la unidad de la nación española, única e indivisible, al aceptar, de nuevo para la citada investidura la celebración de un referéndum de autodeterminación, y habiendo aceptado la demonización para Cataluña de ‘minoría nacional’.

Este grupo de antiguos miembros de las fuerzas armadas, hoy en situación de retiro, preocupados por el devenir de España, alzamos la voz en este manifiesto y pedimos a los responsables de la defensa del ordenamiento constitucional, la destitución del presidente de gobierno y la convocatoria de elecciones generales, lo que sometemos a la consideración de la ciudadanía española al objeto de prevenirla y de que tome conciencia de la gravedad de la situación actual.

Estos llamados se suman a la ofensiva a la relección y los pactos de la derecha y ultraderecha en las calles de Madrid y los pedidos a una revuelta lanzada por destacados líderes del Partido Popular (PP), entre ellos sus ex presidentes José María Aznar (1996-2004) y Mariano Rajoy (2011-2019).

Rajoy apeló a la resistencia cívica para repudiar lo que denominó un proyecto de mutación constitucional, al recordar su actuación en la crisis catalana de 2017, cuando decidió intervenir el gobierno autonómico.

Aplicar el artículo 155 sirvió para defender la Constitución y la ley. Lo que se está haciendo ahora va en la dirección contraria, va contra la Constitución y contra la ley, aseguró.

Aznar advirtió en el diario estadunidense The Wall Street Journal que España está al borde del colapso y en un momento crítico dada “la derogación de facto de la Constitución”.