imos el caso llamado huachicoleo, principalmente sobre enormes cantidades de gasolina. Fue necesario un gran ataque contra este problema. Y lo es para recuperar no sólo el citado combustible, sino al petróleo y su industria en general.
Ahora se empieza a notar un problema similar, pero en la industria eléctrica: el robo de la electricidad en gran escala.
El robo de electricidad ya era un problema, pero no tanto como lo que nos hereda el gobierno inmediato anterior. El primer año de éste tiene en su primer año completo, 2013, el robo de electricidad por año fue de 795 millones de KWH (kilo watts por hora). Estos y los siguientes son datos de la Ccomisión Federal de Electricidad.
En 2014 los robos fueron por un billón 254 millones de KWH –los billones se consideran miles de millones– y siguieron creciendo así:
2015 1 billón 640 millones de KWH
2016 3 billones 4 millones de KWH
2017 4 billones 4 millones de KWH
2018 5 billones 770 millones de KWH
Durante el sexenio, el robo en cuestión aumentó más de siete veces.
Después del primer huachicoleo, esta es otra herencia
del gobierno federal que terminó el 30 de noviembre pasado.
Se suma ésta a otras mejoras que han sido planteadas en las fuentes de generación de electricidad.
Los mejoramientos incluyen las energías que emplean el agua, la geotermia, el viento, el sol y otras formas. También, para tener las mejores tecnologías, la participación de institutos de investigación y desarrollo.
Se ha acentuado el desarrollo de dos ramas creativas de nuestra economía: la del petróleo y la de la electricidad. Tienen una muy trascendental, el desarrollo. Pero también es importante el combate de los elementos destructivos y, por lo mismo, la destrucción de éstos.
Es muy probable que en los próximos días veamos el principio de este nuevo huachicoleo.
Además, los responsables del primer huachicoleo, pueden serlo también los de este segundo.
Estos daños a la población han afectado más a Baja California y a la península de Yucatán con peores sistemas eléctricos. En el primer caso hay además conflictos políticos. Y afectan a los aproximadamente 9 millones de habitantes de regiones con deficiencias en sus sistemas de electricidad.
También hay hospitales sin energía eléctrica en los quirófanos. La electricidad es un servicio, para muchos, de primera necesidad, y debe entenderse así por todos, como de primera necesidad.
Es mucho lo que hay que reparar en este tema. Y se deberá echar abajo todo lo que sea necesario, como lo que se realizó en el primer huachicoleo.