Guadalajara, Jal., De 2014 a 2018 el déficit del Instituto de Pensiones del Estado de Jalisco (Ipejal), producto de la diferencia entre ingresos y gasto, se incrementó de 220 millones de pesos a mil 565 millones; es decir, mil 345 millones que son el tamaño del desfalco y de la irresponsabilidad de quienes manejaron pensiones en el sexenio anterior (del priísta Aristóteles Sandoval, 2013-2018), dijo el gobernador Enrique Alfaro.

Al presentar el diagnóstico y plan de trabajo del Ipejal, el mandatario también dijo que existe un déficit actuarial de 260 mil millones de pesos en el organismo, lo que, aseguró, representaría que en menos de 10 años –para 2027– los recursos serán insuficientes para cubrir las obligaciones con los burócratas estatales y municipales afiliados al sistema de ahorro pensionario.

El déficit actuarial es la diferencia entre los recursos que ingresan y que se proyecta ingresarán al Ipejal contra las obligaciones futuras para el pago de pensiones a jubilados hasta su muerte y después a quien enviudó y sus hijos menores; la atención de salud a sus afiliados y jubilados; préstamos y otros servicios adicionales previstos en la Ley de Pensiones.

De continuar como vamos, en menos de una década los recursos del Ipejal van a ser insuficientes para cubrir 100 por ciento de las obligaciones con los trabajadores, advirtió Alfaro.

Atribuyó que lo que ocurre con las finanzas del Ipejal, organismo que llegó a ser considerado modelo nacional pensionario, se debe a la corrupción, malas inversiones, ineficiencia e inoperancia de quienes encabezaron el instituto.

Además, agregó, muchos ayuntamientos y entidades gubernamentales no han pagado las aportaciones de sus trabajadores y existen manejos inadecuados en los créditos, entre otros factores.

En el desglose del diagnóstico, Iván Argüelles, director del Ipejal, y Juan Partida, secretario de Hacienda Pública y quien quedará al frente del consejo de administración, indicaron que como parte de este desbalance, también está el incremento de pensionados y el número a la baja de afiliados.

Destacaron además que se cuenta el caso de las 68 pensiones que, en promedio, cada una cuesta 150 mil pesos al mes, el aumento en costos y usuarios del servicio médico y el cálculo incorrecto de la rentabilidad de la cartera financiera, pues reportaban 6.9 por ciento cuando era de 1.41 por ciento.

Para contrarrestar dicha situación y para que el gobierno de Jalisco no deba entrar al rescate total en los siguientes años, los funcionarios señalaron que se dará prioridad en los ingresos, egresos y la reserva técnica.