Nueva York. Estados Unidos y Rusia someterán este jueves a votación ante el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) dos proyectos de resolución sobre Venezuela: Washington exige que se convoque a elecciones presidenciales y que se permita el ingreso de ayuda humanitaria, mientras Moscú advierte de las amenazas del uso de la fuerza militar y apremia a respetar la soberanía.

El texto estadunidense asegura que el gobierno de Venezuela, presidido por Nicolás Maduro, provocó un colapso económico. Argumenta que busca impedir un mayor deterioro de la situación humanitaria y llama al ingreso sin trabas de la asistencia.

La propuesta posiblemente obtendrá nueve votos necesarios –de un total de 15– para ser aprobada, pero será vetada por Rusia y China, que apoyan al gobierno bolivariano, vaticinaron diplomáticos.

El proyecto de Rusia expresa inquietud por las amenazas de uso de la fuerza e intentos de intervención en asuntos internos de Venezuela, apoya una solución política y pacífica a la crisis mediante el Mecanismo de Montevideo y reitera en que el gobierno bolivariano es la única autoridad para solicitar asistencia humanitaria, coordinar su ingreso y distribución.

Este texto no cuenta con los nueve votos necesarios para su aprobación, y aunque fuera aprobada, seguramente sería vetada por Estados Unidos, Francia o Reino Unido, indicaron diplomáticos.

Las resoluciones del Consejo de Seguridad, a diferencia de las de la Asamblea General, son vinculantes.

En Ginebra, el canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, abogó ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU por un diálogo entre Maduro y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para buscar una salida a la crisis, y pidió el cese de las agresiones de Washington contra su gobierno.

Cuando Arreaza ingresó al recinto, representaciones de varios países, entre ellos del Grupo de Lima y de la Unión Europea, abandonaron la sesión en señal de que desconocen al gobierno de Maduro.

Lo único que hay que discutir con Maduro en este momento es la hora y la fecha de su partida, tuiteó este miércoles el vicepresidente estadunidense, Mike Pence.