Casi 72 horas después de que el gobierno federal instaló retenes en las entradas y salidas de Tijuana, Baja California, para frenar los homicidios –250 en el primer mes del año–, el crimen organizado colocó cinco mantas con mensajes intimidatorios contra el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Una de ellas presuntamente fue firmada por el cártel de los Arellano Félix, que aliado con el Jalisco Nueva Generación disputan la plaza de esta ciudad con el de Sinaloa.

Agentes policiacos informaron que alrededor de las 22 horas del miércoles detuvieron a un migrante guatemalteco cuando colocaba una de las mantas con amenazas contra el Ejecutivo federal, en un puente peatonal de la delegación La Mesa. El arrestado dijo haber sido contratado por desconocidos.

Según reportes de la Secretaría de Seguridad Pública municipal, las otras mantas fueron halladas la madrugada del jueves en distintos puntos de la ciudad fronteriza.

La semana pasada, el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval González, informó que desde el 4 de febrero se reforzaría la seguridad de Tijuana con mil 800 elementos del Ejército y policías federales y estatales, para efectuar labores de vigilancia en las áreas de mayor incidencia delictiva.

Ayer, la policía municipal de Tijuana reportó el hallazgo de restos humanos en una maleta, en la colonia Las Delicias, y del cadáver de una persona dentro de un tambo en la zona de basura del hotel Tapatío, situado en el centro de esa urbe.

Entre miércoles y jueves hubo al menos 21 homicidios en cinco estados, reportaron autoridades; sólo en Guanajuato fueron 10.