En el Congreso de la Ciudad de México se realizó ayer una sesión solemne con motivo de los 80 años del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).

Legisladores de las fracciones parlamentarias de ese órgano aludieron a la trayectoria y relevancia de ese organismo.

El priísta Ernesto Alarcón Jiménez sostuvo que el recorte de presupuesto a ese organismo ‘‘denota la falta de compromiso del gobierno actual con la cultura, la historia, con nuestras raíces y tradiciones’’.

Desde la tribuna del recinto de Donceles y Allende, Centro Histórico, Alarcón Jiménez apuntó que ‘‘a 80 años de la creación del INAH resulta trágica y accidentada la octava década de investigación, conservación y difusión de nuestro patrimonio cultural e histórico tangible e intangible, pues el gobierno federal para este año decidió recortarle el presupuesto, que se refleja en despidos de personal altamente calificado y especializado como arqueólogos, arquitectos, historiadores, lingüistas, paleontólogos, antropólogos y químicos. Todos ellos fundamentales en las tareas propias de ese organismo”.

Consideró que la falta de recursos afectará a las zonas arqueológicas, la mayoría de ellas con trabajos de conservación. ‘‘Si bien la austeridad que plantea el gobierno actual es su bandera de cambio, no es permisible abandonar ramos tan importantes como es nuestra historia, pues como es mencionado en nuestra propia Constitución, es lo que define a nuestra nación, lo que nos identifica como mexicanos y nos distingue en el mundo”, añadió el legislador.

En su intervención el titular del INAH, Diego Prieto Hernández, destacó que esa institución ‘‘apuesta por el conocimiento, la educación cultural, la transmisión de valores y la referencia permanente de nuestro pasado, de nuestra historia. Los 80 años son motivo de celebración y orgullo del trabajo realizado. Son también motivo de reflexión autocrítica sobre nuestra problemática, nuestros rezagos y necesidades”.

El funcionario apuntó que el INAH ‘‘ha contribuido de manera sustantiva a la preservación de la memoria de nuestro país y ha aportado a ese proceso continuo de construcción de la identidad nacional, misma que tiene por característica la pluriculturalidad”.

Dos grandes retos

Prieto Hernández, quien recordó que el instituto se creó el 3 de febrero de 1939 durante el gobierno de Lázaro Cárdenas del Río, refirió como funciones sustantivas de esa dependencia ser autoridad en materia de conservación y protección, que es un centro de investigación científica, una entidad que imparte educación superior en tres escuelas, y una institución que administra acervos, museos y zonas arqueológicas.

Antes de la participación del director del INAH, la diputada panista Margarita Saldaña consideró que el instituto en la actualidad tiene dos grandes retos: la restauración de todos los monumentos históricos dañados por el sismo del 19 de septiembre de 2017 y la construcción del Tren Maya en una zona arqueológica que es patrimonio de la humanidad.

‘‘Creemos que es indispensable su conocimiento, su posición seria al respecto sin presiones de ningún tipo para que este proyecto se lleve de la mejor forma para que le sirva a México en todos los sentidos”, sostuvo Saldaña.

Al finalizar la sesión solemne, sobre el tema del Tren Maya, Diego Prieto comentó a los medios de comunicación que el INAH se encargará de ‘‘todo lo que es el cuidado del patrimonio histórico, arqueológico y también crearemos un gran proyecto de arqueología, antropología e historia de la región maya de México con motivo del tren”.

Informó que como parte de ese proyecto se abrirán al público un par de zonas arqueológicas y se mejorarán las que ya funcionan.

A ese acto asistieron Lucina Jiménez, directora del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura; Mardonio Carballo, titular de la Dirección General de Culturas Populares, Indígenas y Urbanas de la Secretaría de Cultura federal; Eduardo Villegas, titular de la Coordinación de Memoria Histórica y Cultural de México, y la senadora Susana Harp.

También acudieron el arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma y los ex directores del INAH Sergio Raúl Arroyo, María Teresa Franco, Luciano Cedillo y Alfonso de Maria y Campos.