El secretario de Educación Pública (SEP), Esteban Moctezuma Barragán, aseguró que existe una aceptación de la reforma educativa --aprobada en el sexenio pasado-- principalmente entre la clase media y alta del país, debido a una cuantiosa inversión en promoción de la misma. La reforma educativa fue mucho más poderosa en la propaganda y la publicidad en los medios, que en las escuelas, afirmó.

En reunión con la prensa destacó que tan sólo en 2017 el presupuesto de la SEP para difusión fue de 65 millones de pesos, pero se terminó ejerciendo 2 mil 50 millones de pesos, principalmente para la divulgación de la reforma, por eso se cree como si lo dicho, fuera hecho.

En contraste, agregó, la capacitación de docentes fue casi nula, pues hubo gastos que cambiaron de una partida a otra. Explicó que la reducción de recursos públicos a diversas partidas presupuestales, para destinar más fondos a la promoción, afectó el rubro de capacitación, la cual, dijo, fue sacrificada para difundir la reforma.

Moctezuma Barragán, quien insistió en que sí habrá evaluación de docentes, tanto de nuevo ingreso como en servicio, pero con un mecanismo negociado, sin imposiciones y vinculado a la capacitación, por lo que para su definición se establecerán mesas de diálogo con maestros y sindicatos, ratificó que no se permitirá que en los estados continúe el déficit en el pago de salarios y prestaciones. Por ello, inició una negociación con los gobernadores para determinar qué se puede y qué no en los apoyos federales extraordinarios a las entidades.

El funcionario federal aseguró que con las políticas de austeridad implementadas por la nueva administración federal, se redujeron en 30 por ciento los puestos de confianza en los mandos superiores y medios, los cuales se incrementaron de forma considerable desde la administración del ex presidente Vicente Fox. La medida generó importantes ahorros y reducción del personal de estructura, pues se gastaba mucho en sus sueldos y prestaciones.

En cuanto a la infraestructura educativa manifestó que la recibió en muy mal estado, e incluso, subrayó que la anterior administración federal no concluyó la reparación de los planteles educativos dañados por los sismos del septiembre de 2017.

Todavía tenemos que cargar con la reconstrucción de las escuelas, además hay un número muy grande que no tiene baños ni agua potable. Hay instalaciones escolares en un estado francamente pobre de infraestructura, si visitan las escuelas del Consejo Nacional de Fomento Educativo (Conafe), hay planteles de carrizo, por lo que el esfuerzo en infraestructura será sumamente alto, enfatizó.