Con una ley que tiene 70 años de antigüedad, actualmente operan en México 332 casinos (de un potencial de 694 permisos autorizados en el actual y en sexenios anteriores), así como dos frontones y un hipódromo.

La nueva ley federal, aprobada en diciembre de 2014 en la Cámara de Diputados, quedó congelada –ese mismo mes– en comisiones del Senado de la República.

La pretendida norma prevé transparencia en operaciones y otorgar una licencia por cada establecimiento, y no, como ocurre ahora, paquetes en condiciones desiguales.

Algunos obtuvieron vigencia ilimitada, como el Frontón México o el Hipódromo Agua Caliente, cuya autorización fue por 75 años y vence hasta el año 2064. Otros, por diez y 25 años.

La ley federal mencionada considera como prioridad la creación de un nuevo Instituto de Juegos y Sorteos, cuya máxima rectoría conservaría la Secretaría de Gobernación (SG).

Auge de las apuestas a distancia

Incluye, además, el acceso a casinos y otros centros de juego sólo a mayores de 21 años; la inclusión de faltas graves (desde clausura definitiva hasta multa de 13 millones de pesos y cárcel de tres a 10 años de prisión); además de un mayor control para casinos, centros de apuestas, hipódromos, canódromos, peleas de gallos, ferias y, en especial, juegos con apuestas por Internet.

Esta última opción representa, acorde con especialistas del sector, el nicho de negocio hacia el futuro, de ahí que –comentan– los permisionarios no están abriendo más establecimientos para apuestas, pese a la holgura en las autorizaciones de sexenios anteriores, sino que tienden a las apuestas a distancia.

La autorización más reciente tiene fecha de inicio el 13 de septiembre de 2018 en favor de Ganador Azteca, con vigencia de 25 años.

Otros permisos otorgados durante este sexenio fueron producto, según las autoridades de la SG, de órdenes judiciales.

Este gobierno dio anuencias para la apertura o cambio de sede con potencial de 40 establecimientos en favor de al menos tres grupos empresariales.

Permisos otorgados en sexenio de Calderón

Durante el primer tramo del actual sexenio, la dirección de Juegos y Sorteos combatió a varios de los empresarios beneficiados en el último tramo de la administración de Felipe Calderón.

De 34 permisionarios en operación, la mayoría vence después del año 2030, pero existen otros cuya eventual cancelación o continuidad deberá ser evaluada por el gobierno de López Obrador.

Tal es el caso de Administradora Mexicana de Hipódromo (operadora del Hipódromo de las Américas, en Ciudad de México), el cual, además, tiene en funcionamiento 59 centros de apuestas remotas.

Empresarios del sector calculan el valor del mercado de la industria del juego en el país en más de 55 mil millones de pesos al año.

En el próximo gobierno se deberá clarificar la situación de algunos beneficiarios, como Impulsora Géminis, que tiene abiertos tres centros de apuestas remotas y sorteos de números y su permiso vence el 13 de diciembre próximo.

A su vez, el permiso de Grupo Océano Haman –con cinco casinos Caliente– venció el 15 de octubre del año pasado, y hasta ahora no se ha informado si se le renovó. Lo mismo Apuestas Caliente que, aunque no tiene actualmente ningún establecimiento en operación, su autorización venció en enero de 2016, pero continúa en la lista de permisionarios.