Empresarios del estado de México demandaron a la próxima administración federal potencializar el Aeropuerto Internacional Licenciado Adolfo López Mateos de Toluca, como forma de desahogar el tránsito aéreo de la actual terminal y como complemento de los proyectos de Texcoco o Santa Lucía.

El aeropuerto de Toluca, ya construido y con vialidades de fácil acceso, cuenta con dos terminales y terreno con capacidad para construir una terminal tres, ampliándose hasta una superficie total de 28 mil metros cuadrados, comentó en entrevista Ignacio Morán Escudero, director de TreeHouse, empresa dedicada al desarrollo de vivienda vertical.

Agregó que con dicha ampliación el aeropuerto de la capital del estado de México sería 8 mil metros cuadrados mayor que la terminal aérea de Santa Lucía.

El empresario criticó que mientras en la opinión pública se sigue debatiendo la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), por parte del presidente electo Andrés Manuel López Obrador y su equipo de transición, existen aeropuertos metropolitanos, como el de Toluca, que cuentan con la capacidad, instalaciones, vías de acceso y demás requerimientos para solucionar a corto plazo la saturación de vuelos que presenta el de Ciudad de México.

Consideró que insistir en la habilitación y ampliación de la Base Aérea Militar Número Uno, General Alfredo Lezama Álvarez, mejor conocido como aeropuerto de Santa Lucía, se ha convertido en un capricho de campaña que a todas luces será difícil de cumplir, dado el costo que representa su habilitación, que se estima en 66 mil 878 millones de pesos y dos años de construcción, según datos del equipo del mandatario electo.

Morán Escudero señaló que otro gran inconveniente de detener la obra del NAIM, el cual lleva un avance de 33 a 35 por ciento y pagos a contratistas por 25 mil millones de pesos, según cifras del Grupo Aeroportuario de Ciudad de México (GACM), son los gastos provenientes de recursos públicos y privados que serán tirados a la basura y que el nuevo gobierno tendrá que justificar.

Ante ese panorama, el Aeropuerto Internacional de Toluca se convierte en la opción más rentable para el gobierno entrante, que busca dar soluciones a la sociedad a corto plazo y también evitar el derroche de recursos públicos.

Destacó que otro punto a considerar sobre la decisión del NAIM es el desarrollo urbano, comercial y empresarial que ha tenido en los últimos años el sur poniente de Ciudad de México, en particular en las delegaciones Álvaro Obregón y Cuajimalpa, donde habitan y se mueven diariamente millones de personas, clientes frecuentes del Aeropuerto Internacional Benito Juárez.

Los usuarios del aerotransporte tienen que trasladarse 35 kilómetros y mínimo una hora y media de camino para llegar a la Terminal 1, mientras al aeropuerto de Toluca, que está a 40 kilómetros hacen 35 minutos.