Crecen las olas de calor y aumentan las enfermedades como dengue y mal de Chagas
Jueves 20 de septiembre de 2018, p. 40
El cambio climático es uno de los problemas de salud pública a escala mundial: ha ocasionado que las olas de calor crezcan, ha llevado a un aumento de enfermedades como dengue, mal de Chagas y otras que se contraen por vectores y se estima que de continuar la actual situación, se podrían sumar 250 mil muertes al año.
Tan sólo para América Latina, el número promedio de muertes en 2010 era de 46 mil, pero con el cambio climático puede crecer a 81 mil muertes prevenibles al año, sobre todo relacionadas con el ozono y las partículas suspendidas, explicó Horacio Riojas director de salud ambiental del Instituto Nacional de Salud Ambiental.
En su presentación en el tercer encuentro nacional México ante el cambio climático, el especialista citó estudios que se han realizado sobre el impacto en la salud del cambio climático y de los efectos de contaminantes como el ozono y partículas suspendidas.
Detalló que las olas de calor se han elevado en varios países; en Europa en 2013 causaron muerte de adultos mayores. Otro impacto es la alteración que ocurre en la química atmosférica con la presencia de contaminantes conocidos como forzadores climáticos y que dejan impactos en salud muy reconocidos. Indicó que se calcula que de seguir la situación actual se podrían incorporar 250 mil muertes al año por factores del clima, aunque hay incertidumbres, porque se desconoce que tanto afectan las condiciones previas de salud, la seguridad alimentaria y la nutrición.
Se refirió a que la contaminación del aire es uno de los riesgos ambientales más importantes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que son 4.2 millones de muertes prematuras al año por exposición a contaminantes en las ciudades y en cada país esto corresponde a una de cada ocho muertes que se presentan. Tan sólo las partículas suspendidas que se encuentran en el aire contienen sustancias cancerígenas y son las que penetran más profundamente en los pulmones.
Aseveró que la preocupación es que el cambio climático con más altas temperaturas en ciudades y con más días con ozono, éste ocasionará más efectos agudos y crónicos entre la población, lo cual ya está ocurriendo. Este contaminante provoca un decremento de la actividad pulmonar y eleva el riesgo de cáncer.
El efecto del carbono negro en la salud, provoca un incremento de la mortalidad total, incide en la relacionada con la muerte cerebro vascular y cardiovascular. En México se han hecho varios estudios sobre exposición a partículas y salud, entre ellos uno que comprobó que niños que viven en zonas contaminadas no tienen un desarrollo pulmonar.
En otra mesa del encuentro, Martín Gutiérrez Lacayo, coordinador ejecutivo de la Comisión Ambiental de la Megalópolis explicó que la contaminación ocasiona alrededor de 21 mil muertes prematuras en el Valle de México.
En el centro del país no se respira buena calidad del aire, ya que sólo en el Valle de México este año apenas han habido siete días sin contaminación, en los cuales los índices estuvieron por debajo de los 50 puntos. Además, 90 por ciento de las causas por las que se producen las contingencias ambientales tienen que ver con el clima, explicó.