En foros distintos en la Cámara de Diputados, legisladores de Morena, del Partido del Trabajo y Acción Nacional (PAN) se comprometieron a apoyar a los ex braceros que trabajaron en los campos de Estados Unidos, así como generar políticas de atención a los mexicanos residentes en el extranjero para que cuenten con representación ante el Congreso de la Unión y el Consejo General del Instituto Nacional Electoral.

La bancada de Morena encabezó un foro con grupos de ex braceros, ante quienes se dijo que coadyuvará para gestionar los pagos que se les adeudan desde hace varias décadas, y anunció que la presentación de un punto de acuerdo para exhortar a las secretarías de Gobernación y Relaciones Exteriores con el objetivo de conformar mesas de diálogo y llegar a acuerdos.

Vamos a hacer el compromiso con ustedes de que establezcamos una ruta para encontrar solución a esta lucha histórica. Soy consciente de la injusticia que se ha sostenido durante muchos años y llegó el momento de la justicia, dijo Mario Delgado, coordinador de Morena.

Por su parte, Samuel Herrera Chávez, de esta misma bancada, agregó que buscarán que la Suprema Corte de Justicia de la Nación desahogue los juicios de amparo promovidos por dichos grupos.

Por separado, diputados de PT, PAN y de Morena participaron en el foro Desafíos de una Agenda Legislativa para los Mexicanos en el Exterior, en el que se comprometieron a generar protocolos de atención a los migrantes, crear identificaciones de validez binacional y respaldar la revalidación de estudios para beneficio de jóvenes deportados.

El legislador petisita Benjamín Robles se pronunció por una reforma constitucional que les permita a los migrantes tener voz en el Congreso de la Unión. Ahora sí es posible cambiar las cosas y hacer realidad los derechos plenos de los compatriotas que radican fuera del país, agregó.

Por su parte, Bernardo Méndez, de la organización América sin Muros y uno de los distintos grupos y colectivos que participaron, llamó a los legisladores a promover cambios radicales en la red consular y crear un ombudsman que se encargue de su defensa.