Metas presupuestarias
Detalla Gerardo Esquivel que no elevarán el gasto federal y continuarán con baja en deuda
Jueves 6 de septiembre de 2018, p. 25
Continuar la disminución de la deuda pública respecto del tamaño de la economía, no elevar el actual gasto federal y que las finanzas del gobierno registren un superávit fueron los objetivos anunciados ayer por Gerardo Esquivel, próximo subsecretario de Hacienda, durante un encuentro convocado por la calificadora de deuda Moody’s Investors Service.
El gobierno entrante propondrá al Congreso que el gasto público del próximo año sea similar al de 2018 –alrededor de 5.3 billones de pesos. Ello, como parte de un paquete económico en que se planteará la meta de que las finanzas públicas tengan un superávit primario (ingresos menos gastos antes del pago de deuda).
De esa manera será posible mantener o que sea menor el tamaño de la deuda del sector público respecto del producto interno bruto (PIB), que ahora es cercano a 46 por ciento, detalló Esquivel en la Conferencia Moody’s México 2018, centrada en repasar las perspectivas de la calificación crediticia del país durante el próximo gobierno.
Eso es lo que vamos a planear y eso significa atenernos a los recursos que hoy tenemos. Sólo habrá un mayor gasto si el gobierno aumenta su eficiencia recaudatoria. Pero si no lo logramos, y como no va a haber alza ni nuevos impuestos, tendremos que hacerlo con los recursos que tenemos hoy
, resaltó.
En el Presupuesto de Egresos para el próximo año, cuya propuesta será entregada por el nuevo gobierno al Congreso a más tardar el 15 de diciembre, se incluirán las reasignaciones de gasto, reducción o eliminación de programas y ahorros con los que la próxima administración busca financiar los programas sociales, como la pensión a adultos mayores o las becas a jóvenes, explicó.
Esquivel anticipó que la próxima administración no se ha planteado en el corto plazo promover una reforma al sistema de pensiones, aunque hay que hacerla
, acotó. Estamos conscientes de su importancia, del costo que va a implicar (financiarlas) y de las presiones que se van a generar una vez que empiece a jubilarse la primera generación de trabajadores que comenzó a cotizar bajo el actual régimen
de cuentas individuales, advirtió.
Cancelar NAICM, sin secuelas
Jaime Reusche, analista de deuda soberana de Moody’s para México, indicó que la eventual cancelación del proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), obra que el próximo gobierno someterá a consulta, no tendría un impacto negativo en la calificación de las obligaciones a cargo del Estado mexicano, pero sí sería una señal negativa sobre la forma de conducirse de la siguiente administración.
No habría un efecto directo de lacancelación del aeropuerto sobre la calificación soberana, pues el contagio en las finanzas públicas es muy limitado. Más que nada sería una señal negativa de hacia dónde va el gobierno
, añadió.