Organizaciones pertenecientes al movimiento Plan de Ayala Siglo XXI plantearon a Víctor Villalobos Arámbula, próximo titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), sus propuestas para aumentar el ingreso de los campesinos y alcanzar la soberanía alimentaria.

El martes se reunieron con Villalobos Arámbula, con quien establecieron una mesa de diálogo, informó José Jacobo Femat, líder de la Central de Organizaciones Campesinas y Populares (Cocyp), quien añadió que en la reunión el próximo titular de la dependencia les explicó cuál será el programa de trabajo que se impulsará en la Sagarpa.

Allí, los campesinos representantes de cerca de 80 agrupaciones provenientes de diversas partes del país, le plantearon algunas de sus inquietudes, por ejemplo los precios de garantía y la posibilidad que éstos sólo se restrinjan a ciertos productos y a determinados estados.

En los precios de garantía se proponen como básicos cuatro productos: maíz, frijol, arroz y leche, pero las organizaciones campesinas estamos contemplando todos los productos de la canasta básica, es decir todas las frutas y verduras. También creemos que se deben incluir la soya, el trigo y el sorgo. Este último es un grano forrajero y se importa en grandes volúmenes desde Estados Unidos.

Añadió que se abordaron temas como acabar con la corrupción en el sector y la dispersión de recursos que no tienen ningún impacto económico o productivo entre los productores rurales.

También a los campesinos se les dio a conocer que habrá cambio en los programas, el fortalecimiento de la atención directa a los productores, la generalización de la asistencia técnica hacia los productores.

Jacobo Femat informó que a la reunión también acudieron asociaciones de ingenieros agrícolas y especialistas de la Universidad Autónoma Chapingo y acotó que se tocaron también temas como el presupuesto para el campo, financiamiento rural, rehabilitación de las plantas de fertilizantes y la fusión de Diconsa y Liconsa.

En cuanto al crédito rural expuso que dada la descapitalización existente, debe haber una tasa muy baja de interés para los agricultores. Que no tengamos tasas comerciales, sino una preferencial y que vaya acompañado de asistencia técnica rural para los 32 mil ejidos y los cerca de un millón de pequeños propietarios rurales con superficies dedicadas a la agricultura y ganadería.

Sobre la fusión de Diconsa y Liconsa, la intención es que contribuya a la soberanía alimentaria para que mediante el sistema se haga el acopio de grano y se pueda dar un sistema nacional de acopio y reserva que beneficie, sobre todo, a pequeños productores, además de garantizar un valor justo, un precio de garantía que recupere niveles de inversión y rentabilidad de la tierra”.

Las nuevas plantas de fertilizantes, en tanto, serían tres para la producción de tres millones de toneladas de fertilizantes. La idea es que sean puestas en operación a partir del próximo año.