Lunes 4 de diciembre de 2017, p. 12
La Comisión Nacional de Seguridad (CNS) y el Sistema Penitenciario Federal encabezaron la firma de un convenio para el sector carcelario, en cumplimiento del eje constitucional de reinserción social: trabajo en beneficio de personas privadas de su libertad en centros de reclusión federales.
Lo anterior fue parte de los trabajos de la 16 asamblea plenaria de la Conferencia Nacional del Sistema Penitenciario. El convenio garantizará capacitación y empleo remunerado, tal como determina la ley para que las personas que actualmente compurgan una pena tengan más oportunidades de trabajo una vez que obtengan su libertad.
En una primera etapa el convenio beneficiará a aproximadamente mil 500 personas privadas de su libertad en los centros federales número dos Occidente, 12 CPS-Guanajuato, 13 CPS-Oaxaca y 16 CPS-Femenil Morelos.
La firma de dicho convenio la encabezaron Alejandro Chanes en representación del Comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales Heredia, y el comisionado del Sistema Penitenciario Federal, José Alberto Rodríguez Calderón, en su calidad de secretario técnico de la Conferencia Nacional del Sistema Penitenciario, en el cual participan cuatro empresas: Industria y Vinculación Social de México, Industria Penitenciaria de Reinserción Social, Farmacéutica Alquimilla y Asociación Civil Industria Penitenciaria de Oaxaca.
Apoyo al proceso de reinserción social
Rodríguez Calderón reconoció el compromiso de esas empresas por creer y sumarse al proceso de reinserción mediante la generación de empleos en beneficio de las personas privadas de su libertad.
Por otra parte, el coordinador general de Prevención y Readaptación Social, Antonio Molina Díaz, adelantó que las actividades en los diferentes centros carcelarios darán comienzo a partir de la semana próxima con la elaboración de más de 56 mil uniformes para el Sistema Penitenciario Federal, placas de identificación vehicular y ropa médica y hospitalaria.
En el caso del Centro Federal de Readaptación Social 16, los trabajos se iniciarán a principios del año siguiente.
Al respecto, los empresarios se pronunciaron por que se ponga fin fin a los prejuicios de la mano de obra penitenciaria. Argumentó que los productos que se generarán en los centros carcelarios federales exigen estándares especiales y de gran calidad.