Nezahualcóyotl, Mex.

Sólo era cuestión de días para que Eduardo Ruiz Espinoza saliera del penal Neza-Bordo, al cumplir una condena por robo. Hace siete meses la juez le otorgó el beneficio de la libertad condicional. Hoy, sus familiares desconocen cuándo saldrá, pues lo confinaron al área de castigo por defender su vida ante la banda de Luis N, El Tatos, interno acusado de extorsión en ese centro penitenciario.

María Espinoza, madre de Eduardo, apenas pudo ver a su hijo el jueves pasado y confirmó que aún tiene las huellas de tortura propinadas por al menos 10 compinches de El Tatos, además de una costilla fracturada, lesiones en un brazo y que lo intentaron ahogar en un tambo de agua. La mujer, quien viste de manera humilde, reconoce que no tuvo “el dinero para depositarle a ese Tatos”.

Relata que apenas le alcanza para pagar la renta de su vivienda en el municipio de La Paz. Aun así, su hijo fue víctima del reo que ya fue trasladado a un penal de máxima seguridad en Durango, cuyo modus operandi difundió en días recientes la agencia MVT, en videos que muestran cómo torturaban a los presos para exigir a sus familiares el pago de cuotas.

“Mi hijo está en la fortaleza; lo tienen castigado, aunque El Tatos lo estaba extorsionando con 6 mil pesos. Como yo no pude depositarle ese dinero, pues él (Eduardo) se enfrentó con ellos. Llegaron directamente a buscarlo a su celda y lo atacaron”, narra María Espinosa.

“Mi hijo me dice que la gente del Tatos traían tres cuchillos; él se defendió porque intentaron picarlo (acuchillarlo)”; sin embargo, asegura que las autoridades penitenciarias calificaron la acción de riña y por eso desde hace más de un mes Eduardo se encuentra en el área de castigo.

Eduardo ingresó al penal estatal de Neza-Bordo bajo el número de carpeta administrativa 226/2015 y después con el expediente 128/2016. Fue sentenciado por robo. El juzgado de ejecución de dentencias del distrito judicial de Nezahualcóyotl le concedió el beneficio de la libertad condicional al sistema de localización y rastreo.

Su madre afirma que ella cumplió con todos los requerimientos del juez, incluso cubrió los gastos de reparación del daño y su hijo debió quedar libre en marzo pasado; pero la Dirección General de Prevención y Readaptación Social no ha cumplido al ordenamiento judicial.

Antes de que fuera enviado a la fortaleza debió quedar libre. Me traen vuelta y vuelta y ahora unos días antes de que se hicieran públicos los videos del modus operandi de la banda de El Tatos, ocurrió el enfrentamiento donde el extorsionador intentó asesinar a su hijo.