Si Estados Unidos decide salir del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) el pacto seguirá vigente entre México y Canadá, dijeron el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, y el secretario de Comercio Internacional de Canadá, François-Philippe Champagne, en entrevista televisiva.

El TLCAN no se va a venir abajo, la posibilidad es que quizá Estados Unidos se salga, pero este tratado seguirá regulando nuestro comercio con Canadá, dijo el encargado de la política comercial de México en un noticiero de televisión.

Los funcionarios reiteraron que en el caso de que Estados Unidos salga del tratado las reglas del acuerdo seguirán vigentes para el intercambio comercial de México y Canadá. También coincidieron en que la actualización del TLCAN no debe incluir una cláusula de caducidad cada cinco años, como pretende Estados Unidos.

Entrevistado al término de la sesión solemne del Senado en honor al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, Guajardo manifestó que la cuarta ronda de negociaciones del tratado se ha tornado muy complicada. Dijo que ayer mismo, por la tarde, viajaría al vecino país del norte para incorporarse a las negociaciones. Todas las negociaciones son complejas y ésta tiene grandes niveles de complejidad, apuntó.

Guajardo asistió juntó con el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, a la sesión solemne del Senado, en la que se dio la bienvenida al primer ministro canadiense.

Al final de la ceremonia, Guajardo dijo que México trabajará fuerte para avanzar en el objetivo de un acuerdo renovado para América del Norte, y calificó el mensaje de Trudeau de un gran discurso que no sólo tiene la visión de América del Norte, sino el propósito de centrarse en el bienestar de los ciudadanos, en el mejoramiento de sus condiciones y derechos, donde todo mundo gane.

El presidente del Senado, el panista Ernesto Cordero, refirió que el TLCAN anda medio malito. Creo que todo es posible y en unas negociaciones hay puntos muy álgidos, muy ríspidos, parece que estamos entrando a una de esas etapas”. Incluso apuntó: hay que darle seguimiento muy puntual a los arreglos. Si las condiciones que está exigiendo Estados Unidos son inadmisibles para nosotros, más vale estar fuera del tratado que estar maltratado dentro del acuerdo.

En ese sentido coincidió horas antes el secretario de Comercio Internacional de Canadá, François-Philippe Champagne, quien acotó que tanto su país como México no van a aceptar cualquier acuerdo, por lo que ambos trabajan para tener una postura constructiva.

Sostuvo que quizás Estados Unidos está tratando de dinamitar la negociación, pero lo que tenemos que recordar es que todo tiene consecuencias en las fronteras. Indicó que su país también está trabajando en la diversificación, sobre todo para abrirse con la zona Asia-Pacífico, así como la Alianza del Pacifico, pero con México está tratando de construir puentes, porque es el tercer socio comercial.

El secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade Kuribreña, aseguró que hay espacio en la negociación del TLCAN para alcanzar un consenso que beneficie a México, Estados Unidos y Canadá. Durante un encuentro con periodistas durante su visita de trabajo a Washington, el funcionario sostuvo que la parte financiera del tratado va caminando bien.

Sobre el efecto que la renegociación del tratado ha tenido en el tipo de cambio, consideró que México ha venido haciendo su trabajo, no ahora, sino por muchos años, para ir construyendo una economía resistente, flexible, moderna y con fuentes de crecimiento cada vez más balanceadas.

Las declaraciones de Meade se dieron en el contexto de su participación en las reuniones anuales del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional.

Por su parte, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Juan Pablo Castañón, manifestó que el sector privado no está de acuerdo con la cláusula de caducidad de cinco años propuesta por Estados Unidos, porque no genera certidumbre a las inversiones de largo plazo, pero apuntó que si se discute y se enriquece esa propuesta con mecanismos que promuevan una actualización que no implique concluir el TLCAN, podría ser una salida positiva.

Sobre el tema salarial, explicó que México tiene un ritmo de industrialización acompañado de un reforma educativa, que debe ir generando el talento necesario para llegar al nivel de los estándares. Aunado a ello la realidad del país es que no todas las industrias pagan lo mismo y cambia por regiones.