En caso de que exista la sospecha de que en los inmuebles colapsados o dañados en Ciudad de México hubo irregularidades en los procesos de autorización y construcción, las personas afectadas pueden denunciar penalmente a las constructoras y sus representantes, a los directores responsables de obra y a funcionarios públicos.

Alicia Azzolini, experta del Instituto Nacional de Ciencias Penales (Inacipe), detalló en entrevista con La Jornada que las denuncias procederán en caso de que las construcciones no hayan cumplido con los lineamientos del reglamento aprobado, luego el terremoto de 1985.

De acuerdo con la especialista, los delitos que se pueden sancionar van desde homicidio –donde hubo muertos por la caída de los inmuebles–, lesiones, daño en propiedad ajena, fraude –si se comprueba que se le dijo a los compradores que se usaron ciertos materiales y se usaron otros de menor calidad–, hasta daños ambientales, pues se pudo haber alterado el tipo de uso de suelo.

Primer paso: consultar a un experto

Destacó que no se debe generar la expectativa, pues no en todos los casos hay elementos para presentar una denuncia y en otros éstas podrían no prosperar. En primer lugar, dijo, se debe consultar a un experto en estructuras, quien deberá dar un dictamen.

Otro elemento es que las construcciones deben ser relativamente recientes, posteriores a 1985, pues hay varios edificios que colapsaron, pero que ya tenían más de 50 años de antigüedad.

No en todos los casos hay delito y en otros tampoco va a prosperar la investigación. El tema es cuando (los constructores) mintieron, usaron materiales que no eran los adecuados o requeridos (por los reglamentos), cuando las empresas no cumplieron con las normas y cuando los servidores públicos no siguieron su obligación de supervisar adecuadamente las construcciones.

La especialista indicó que el sismo magnitud 7.1 fue un evento con mucha intensidad, por lo que las autoridades deberán realizar con cuidado y mucha responsabilidad las indagatorias correspondientes, pues pudieron existir estructuras que cumplieron con las normas de construcción, pero aun así colapsaron por la fuerza del terremoto.