El valor de las obras rescatadas, propiedad de un amigo del pintor, superaría 25 mdd
Desde que el hurto se perpetró en julio de 2015, la policía española ha detenido a 10 personas imputadas por ese ilícito
Los títulos de esas piezas de arte no se han dado a conocer
Jueves 20 de julio de 2017, p. 5
Madrid.
La policía española informó que recuperó tres de las cinco obras de Francis Bacon robadas en 2015, en un departamento del centro de Madrid, domicilio de su amigo, José Capelo, a quien el artista legó varias piezas artísticas.
En el operativo no se logró asegurar todas las piezas hurtadas, pero 10 personas supuestamente vinculadas al robo fueron detenidas.
Bacon, quien nació en Irlanda en 1909 y falleció en Madrid en 1992, mantuvo estrecha relación con la capital española, donde pasaba largas temporadas, sobre todo visitando uno de los que fueron sus refugios más socorridos, el Museo del Prado, en particular las salas que albergan los cuadros de Diego Velázquez y Francisco de Goya, sus referentes.
Bacon vivió un infierno personal que sólo logró purgar y plasmar en sus obras. Sus retratos y su trazo desgarrado lo convirtieron en un artista de culto en la segunda mitad del siglo XX, pero no fue hasta su muerte, cuando se erigió en un pintor no sólo adorado y venerado por los historiadores del arte y coleccionistas, sino también por los inversionistas y, de forma irremediable, por los ladrones de obras de arte, pues éstos vieron cómo en poco tiempo sus obras adquirían un precio desorbitado en el mercado del arte.
Resultados a cuentagotas
Hace dos años, en julio de 2015, unos ladrones expertos en obras de arte y que conocían de la existencia de José Capelo –amigo de Bacon– y de su valiosísima colección privada irrumpieron en su vivienda del centro de Madrid, cuando él vacacionaba en Londres. Nadie supo nada hasta pasados unos días, pero cuando Capelo volvió de su viaje se percató de que habían entrado en su domicilio y se llevaron probablemente los cinco objetos más valiosos que poseía: cinco obras de Bacon, su amigo y con quien había compartido muchos momentos en Madrid, junto al que fue pareja del pintor hasta el final de sus días, John Andrews.
Las investigaciones policiales lograron resultados a cuentagotas. Desde comienzos de 2016 se registraron las primeras detenciones de personas, supuestamente vinculadas con ese robo y con otros hurtos en viviendas de lujo en Madrid, pero no se habían localizado las piezas sustraídas con lo que el delito todavía no se podía imputar a los detenidos, que suman una decena.
Debido al carácter secreto de la investigación y del robo no se han dado a conocer los títulos de las obras hurtadas ni de las dos que faltan, sin embargo, la policía sostiene que su valor en el mercado superaría 25 millones de dólares, pero sólo de las tres recuperadas.
Se calcula que con las otras dos podrían llegar hasta 40 millones de dólares y la suma podría aumentar.
Bacon es uno de los artistas modernos más cotizados. Por ejemplo, el tríptico de 1969 que dedicó a su amigo y pintor Lucian Freud –nieto de Sigmund Freud– se subastó hace cinco años por 127 millones de dólares, en una histórica subasta en Nueva York, que lo situó en la lista de los 10 artistas más caros de la historia.