Frente a la representación del estado de Michoacán en la capital del país, la cual fue desalojada desde la mañana de ayer, cerca de una decena de integrantes de organizaciones urbano populares demandaron a Silvano Aureoles Conejo, gobernador de la entidad, que cese todo acto de represión y violencia contra los estudiantes normalistas en el país.

Ante una valla de policías capitalinos, los inconformes exigieron justicia para el estudiante Gael Solorio, quien resultó con una herida de bala en el rostro, tras un enfrentamiento con elementos de seguridad del estado.

Manifestaron su repudio a acciones en las que se dispara contra estudiantes desarmados y exigieron al gobierno del estado atender las demandas de los alumnos de la Escuela Normal Rural Vasco de Quiroga, ubicada en Tiripetío, Michoacán.

En la protesta participaron ex integrantes del movimiento estudiantil del Instituto Politécnico Nacional, quienes señalaron que en México existe una política de represión contra los estudiantes y los jóvenes, pero que en este contexto ha sido más visible su estrategia para acabar con el normalismo rural, pues aún son los alumnos que más incomodan y resisten al gobierno.

Al acto también acudieron profesores disidentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, quienes anunciaron que el próximo domingo, durante la sesión de su Asamblea Nacional Representativa, se abordará el tema del normalismo y la coordinación con la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México.