Guadalajara, Jal.

En el kilómetro 15 de la carretera Guadalajara-Chapala, todas las mañanas desde hace nueve días, ejidatarios de El Zapote inician una marcha que culmina en un plantón de varias horas en el aeropuerto de Guadalajara, en exigencia del pago de indemnizaciones justas por 307 hectáreas que el gobierno federal comenzó a expropiar en 1975 en favor de la terminal aérea.

La de ayer reunió a unos 150 labriegos, quienes al llegar al aeropuerto Miguel Hidalgo se colocaron con mantas en un camellón para no obstruir el paso. Aún así, los guardias colocaron vallas a la entrada de las salas de espera, lo que causó molestias a los usuarios.

Las marchas y plantones diarios son la nueva etapa de una lucha que los ejidatarios ya ganaron en tribunales tras interponer una demanda en 2015. Sin embargo, tanto la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) como el Grupo Aeroportuario del Pacífico se niegan a reconocer el avalúo hecho por los campesinos, y ofrecen apenas 61 de los 2 mil 600 millones de pesos demandados.

El 29 de abril de 2016 el tercer juzgado de distrito en materia administrativa dio cuenta del acuerdo tomado por el segundo tribunal colegiado en materia administrativa sobre la revisión del expediente 298/2015, el cual ordenó el pago de la indemnización, pero no precisa si el avalúo sería a valor agrario o comercial, lo que tiene empantanadas las negociaciones.

La más reciente reunión fue el martes. Los campesinos y sus abogados se reunieron con funcionarios de la Secretaría de Gobernación, de la SCT y de la comandancia del aeropuerto, pero no llegaron a un acuerdo y los reclamantes decidieron continuar con sus movilizaciones.

El oficial mayor de la SCT, Rodrigo Ramírez Reyes, dijo que el reclamo es inválido porque lo que exigen está pagado y desde 1975, cuando se dio la primera expropiación, se ha ido liquidando paulatinamente a los ejidatarios. Estamos esperando el pronunciamiento de un juez sobre si la manera en que pagó el gobierno federal a lo largo de este tiempo fue correcta, apuntó.

Por su parte, grupos empresariales jaliscienses publicaron un desplegado para exigir al gobierno federal soluciones inmediatas ante las pérdidas del transporte de carga y las molestias a los usuarios generadas por las manifestaciones.

Pidieron además certeza jurídica sobre la propiedad de los terrenos concesionados al GAP, a fin de garantizar la construcción de la segunda pista en un año, pues 134 de las hectáreas que se utilizarían también pertenecen al ejido El Zapote.

Asimismo, demandan una transformación urgente de la terminal y piden a los ejidatarios no afectar a los usuarios.