Veracruz ha vivido una ola de violencia en los casi siete meses de gobierno del panista Miguel Ángel Yunes Linares. En horas recientes, las autoridades reportaron ocho asesinatos.

Frente al despacho jurídico de Jaime Téllez Marie, titular de la Secretaría de Seguridad Pública del estado, en el puerto de Veracruz, fueron tirados en bolsas los restos de tres personas mutiladas, junto con un mensaje en el cual un grupo criminal acusa al funcionario de favorecer a un cártel rival.

Yunes Linares desmintió estos señalamientos contra su colaborador y consideró la violencia reciente una reacción a la decisión del Grupo de Coordinación Veracruz, que el lunes determinó dar a conocer las fotografías de personas vinculadas con grupos delictivos y ofrecer una recompensa hasta de un millón de pesos para quien aporte información que conduzca a su captura.

La tarde del martes tres trabajadores de una agencia de publicidad fueron heridos –uno de gravedad– por un grupo armado cuando colocaban el anuncio de las recompensas en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río.

Las otras cinco ejecuciones fueron perpetradas ayer en los municipios de Poza Rica, Minatitlán, Sayula de Alemán, Catemaco y Xalapa.

En Pueblo Nuevo, Guanajuato, el ex candidato perredista a la alcaldía en 2015, José Encarnación Prieto Hernández, fue baleado por pistoleros en una gasolinera de su propiedad, cerca de la comunidad La Purísima. El empresario murió cuando recibía atención en el hospital Guadalupano.

En la misma entidad, un comando asesinó a una niña de tres años cuando sus padres fueron atacados en su domicilio, en el municipio de Silao. Ernesto García Rodríguez, papá de la menor, falleció mientras recibía atención. La madre, Ana Nayeli González, fue hospitalizada.

En Chihuahua, seis personas fueron asesinadas en horas recientes, entre ellas Juan Carlos López López, detenido en 2014 por fuerzas federales y acusado de ser el líder estatal del grupo Gente Nueva, parte de la estructura del cártel de Sinaloa.

López fue ultimado a cuchilladas por su compañero de celda en la cárcel de alta seguridad de Aquiles Serdán, a las afueras de la ciudad de Chihuahua, informó el fiscal general, César Peniche Espejel.

Otras cinco personas fallecieron en hechos delictivos: una en la capital de Chihuahua, otra en Ciudad Juárez, dos hermanos en el municipio de Guerrero y un tarahumara en Creel, municipio de Bocoyna.

Finalmente, el alcalde de Jungapeo, Michoacán, Javier Hernández Rivera, y cinco policías municipales fueron detenidos el miércoles por estar involucrados con el secuestro de dos personas que el martes fueron encontradas sin vida, informó la Procuraduría General de Justicia del Estado.