Frente a las medidas en contra de los migrantes que ha tomado el gobierno del presidente Donald Trump, la Arquidiócesis de México refirió que el país debe brindar soluciones legales, políticas y sociales frente a dicha coyuntura.

En el semanario Desde la fe advirtió que esas respuestas gubernamentales ya no son una opción, son cuestiones imperativas.

Subrayó que el futuro de los migrantes ya nos endosa documentos de difícil cobro y reparación. Esto puede ser una pesadilla, pero en la esperanza cristiana representará un reto para vislumbrar un futuro más prometedor.

Luego de recordar que los migrantes dejaron el país en busca de oportunidades, preguntó si realmente México es capaz de recibir adecuadamente a los connacionales. Los migrantes salieron de su país en busca de un sueño. ¿Estamos preparados para ofrecerlo?

Dijo que Trump ha girado ordenes ejecutivas que han creado un ambiente hostil, de inseguridad, incertidumbre y terror contra miles de personas a quienes se les imputan delitos y condiciones de criminalidad sólo por tener una situación migratoria irregular.

Apuntó que la aplicación de esas medidas arrojan resultados lamentables; el primero de ellos; la separación de familias cuando los padres son repatriados, dejando a los hijos en completo estado de indefensión.

En el editorial titulado ¿Estamos preparados? remarcó que en la reunión que obispos mexicanos y estadunidenses sostuvieron la semana pasada en Brownsville, Texas, los jerarcas se comprometieron a que ante el terror de la administración Trump, la Iglesia católica a ambos lados de la frontera apela a la unión.