Las obligaciones del Sistema Nacional de Pensiones ascendieron en 2014 a 11.4 billones de pesos, esto es, 66.5 por ciento del PIB de ese año, y los recursos que se necesitarán para financiar las jubilaciones ‘‘podrían representar en el mediano y largo plazos una presión a las finanzas públicas’’, informó la Auditoría Superior de la Federación (ASF).

En el informe de la cuenta pública 2015, alertó que un estudio sobre las pensiones en México indica que los trabajadores no recibirán ‘‘ni la mitad de su último sueldo al retirarse’’, y en contraste un ex trabajador de la Universidad Autónoma de Colima recibe 941 mil 400 pesos mensuales.

La auditoría indicó que, del monto total, 2 billones representan los pasivos de Petróleos Mexicanos (Pemex) y de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), y dijo que, según los estudios actuariales sobre el flujo de gastos que conlleva este sistema, alcanzarán su valor máximo en 2034, cuando se requerirán recursos fiscales para el régimen de pensiones del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) por 156 mil 563 millones anuales, y de 253 mil 803 millones para el del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste).

En su auditoría al Sistema Nacional de Pensiones, la ASF citó las recomendaciones que ha hecho la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), respecto de que ‘‘el primer paso para incrementar las tasas de remplazo es mejorar el nivel de contribución, al menos para los trabajadores del sector privado, dejando las demás variables constantes’’.

Para acercar el monto de jubilaciones al último salario recibido por un trabajador, expuso la ASF, la OCDE ‘‘recomienda mejorar los incentivos para el ahorro voluntario previsional, y para evitar que el aumento de la contribución obligatoria traiga consigo una reducción del ingreso disponible, sugiere que el incremento en las tasas de contribución obligatoria se vincule a los aumentos en salarios’’.

Al referirse a la sustentabilidad financiera y actuarial del sistema de pensiones, refirió que un análisis de las valuaciones actuariales al 31 de diciembre de 2014 –el dato más reciente de que dispone– determinó que el valor presente de los ingresos de los 72 regímenes de beneficio definido ascendió a 6 billones 211 mil millones de pesos, en tanto que el valor presente de las obligaciones pensionarias fue de 11.4 billones. Lo anterior se traduce, explicó la auditoría, en un déficit de 5 billones 253 mil millones de pesos.

Se detalló que en 2015 se ejercieron 963 mil 428 millones de pesos para el sistema de pensiones, 10 por ciento más que lo aprobado por la Cámara de Diputados, que autorizó 875 mil 536 millones. Los recursos fiscales para pensiones se han incrementado a un promedio anual de 5.2 por ciento entre 2010 y 2015, al pasar de 52 mil 722 millones a 67 mil 955 millones de pesos, informó.