Ante el endurecimiento de las políticas de Estados Unidos que impactarán el campo mexicano, Greenpeace hizo un llamado al gobierno federal a impulsar la agricultura ecológica. Ello liberaría a los campesinos del uso de fertilizantes y plaguicidas, que elevan los costos de producción y ponen en riesgo la salud.

En un comunicado, Aleira Lara, lideresa del Programa de Agricultura y Alimentación de Greenpeace, sostuvo: Apostar por la agricultura ecológica reducirá la migración y abrirá nuevas puertas a la industria alimentaria nacional. Además, impulsará el consumo local.

Recordó que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) recomienda que las importaciones de alimentos no rebasen 25 por ciento de lo que se consume en cada país, pero en México la compra de alimentos básicos del exterior es de 45 puntos porcentuales.

La nación es el tercer mercado de exportación agrícola de Estados Unidos. Las ventas estadunidenses de alimentos y productos agrícolas a México llegaron a la cifra récord de 19 mil 500 millones de dólares en 2014, lo cual representa casi 13 por ciento de todas las exportaciones agrícolas del país vecino, principalmente maíz, soya y productos lácteos y de cerdo, así como aves de corral y carne de res.