Los albergues y refugios para migrantes ubicados en municipios fronterizos de Sonora se preparan para atender a indocumentados expulsados de Estados Unidos a causa de la reforma migratoria que el nuevo presidente del país vecino, Donald Trump, pretende imponer. Por lo pronto, los albergues de Nogales y Agua Prieta organizan y planean sus próximas acciones para recibir probables deportaciones masivas.

Francisco Loureiro Herrera, fundador del albergue Juan Bosco del municipio de Nogales, aseguró que en el lugar hay espacio suficiente para recibir a migrantes, además de que cuenta con personal capacitado para atenderlos y asesorarlos jurídicamente. ‘‘Estamos preparados y coordinados con otras instituciones, entre ellas Grupo Beta, Comedor Kino, Ayuda a Migrantes del Santuario y otras agrupaciones para dar la atención que sea necesaria en favor de nuestros hermanos migrantes’’, sostuvo.

Mientras, en el municipio de Agua Prieta, el coordinador del albergue Came Exodus, Alberto Ramos Gutiérrez, coincidió en que instituciones encargadas de dar hospedaje gratuito en la frontera están coordinadas.

En este contexto, la gobernadora de Sonora, Claudia Pavlovich Arellano, anunció que solicitará recursos extraordinarios al gobierno federal para atender a los indocumentados desamparados que ingresen al estado, y así responder a la amenaza de Donald Trump de efectuar deportaciones multitudinarias.

En entrevista, Pavlovich Arellano adelantó que su petición es parte de un acuerdo entre mandatarios de estados fronterizos, la cual se expondrá ante el presidente Enrique Peña Nieto durante la próxima reunión plenaria de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago).

Aseguró que el gobierno de Sonora actualmente prepara varias estrategias para atender una eventual crisis humana debido a las deportaciones masivas de indocumentados, de ahí el presupuesto extraordinario que solicitará para implementarlas.

De su lado, Efraín Jiménez Muñoz, vicepresidente de la Federación de Clubes Zacatecanos del Sur de California, consideró que Estados Unidos es un país de instituciones, mismas que están por enfrentar un reto ‘‘para ver qué tan fuertes están para resistir los embates de un presidente xenófobo y racista, como Donald Trump’’.

Jiménez Muñoz visitó la capital de Zacatecas para verificar la aplicación de recursos del Programa 3 por 1, por el cual se realizaron diversas obras sociales con recursos enviados por migrantes en proyectos previamente acordados por un comité.

En entrevista, Jiménez Muñoz pidió a la comunidad migrante ‘‘no entrar en pánico’’, pues si Trump ha llegado ‘‘violentando la Constitución’’ estadunidense, amagando con repatriar en masa a latinos indocumentados, ‘‘es imposible de inicio que se pueda deportar a millones de mexicanos de la noche a la mañana’’. Explicó que de darse las deportaciones ‘‘va a ser todo un proceso y el sistema judicial estadunidense se va a saturar con tantas demandas’’.