En 2016 de 1.6 millones de unidades vendidas, 886 mil eran foráneas y 716 mil nacionales
Lunes 23 de enero de 2017, p. 23
Desde 2000, los consumidores mexicanos compran cada año más vehículos nuevos importados que los hechos en México.
Datos de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (Amia) señalan que el año pasado, de los 1.6 millones de vehículos ligeros colocados en el mercado nacional, 44.7 por ciento correspondió a unidades hechas en México, equivalentes a 716 mil vehículos. Esta cantidad resultó inferior a las 886 mil unidades vendidas dentro del país, pero fabricadas en el extranjero.
La última vez que los consumidores mexicanos adquirieron más vehículos fabricados en México fue hace 16 años cuando, según los informes históricos de la Amia, los mexicanos compraron 451 mil vehículos fabricados en México en aquel año, cantidad superior a los 402 mil de importación.
Tras la cancelación de inversiones por mil 600 millones de dólares en San Luis Potosí por la automotriz estadunidense Ford, comenzaron en México llamados a comprar productos nacionales en respuesta a esa decisión.
La semana pasada, los industriales del país y el comercio organizado instaron a los mexicanos a consumir lo hecho en México ante lo que consideraron un eventual cierre de las fronteras comerciales con Estados Unidos.
Un par de empresas mexicanas suspendieron la compra de vehículos Ford, entre ellas Experiencias Xcaret, propietaria de parques turísticos temáticos en Quintana Roo.
La firma mexicana consideró que la decisión de Ford va en contra de los compromisos de inclusión, prosperidad y cultura de paz entre las naciones
. Más que una campaña antiestadunidense, Experiencias Xcaret suspendió la relación comercial con Ford por congruencia, dijo Iliana Rodríguez, vocera de la firma turística mexicana.
Experiencias Xcaret es una compañía que cree en México y prueba de ello es que casi la totalidad de sus insumos los adquiere dentro del país, señaló Rodríguez. Una parte mínima es importada por la única razón de que estos productos no están disponibles en el país, agregó la vocera en entrevista.
En tanto, asociaciones agrupadas en la Alianza por la Salud Alimentaria lanzaron la campaña Consumidores al grito de guerra para hacer frente a lo que llamó injurias, amenazas
del ahora presidente Donald Trump, y la inacción del gobierno mexicano.
El llamado de la alianza es a que los ciudadanos mexicanos compren productos elaborados en el país, de preferencia de pequeñas empresas y comercios, de pequeños productores del campo, así como comprar alimentos frescos en tianguis y mercados locales. Insta además a acercarse más en sus compras a los productores y castigar con su poder de compra a todas aquellas industrias que favorezcan las políticas del gobierno entrante estadunidense que atentan contra México y los mexicanos
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