Zacatecas, Zac.

Más de 200 policías estatales, federales y elementos del Ejército mexicano ingresaron el mediodía de ayer al Centro de Readaptación Social (Cereso) de Cieneguillas para controlar una riña en el dormitorio Cañón Azul, donde Roberto Bueno, uno de los líderes del cártel del Golfo en el penal, fue apuñalado.

Fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública informaron que al parecer se trata de una disputa entre miembros del grupo delictivo. Los médicos reportaron que el interno se encuentra muy grave y es atendido en el hospital general de Zacatecas.

La operación de control estuvo encabezada por Francisco Murillo Belmontes, procurador general de Justicia de Zacatecas, así como por el general Froylán Carlos Cruz, titular de la Secretaría de Seguridad Pública.

Murillo Belmontes explicó que Roberto Bueno se fue agredido cuando era trasladado por varios custodios para hacer algunos trámites en la dirección del Cereso.

Detalló que un grupo de reos los interceptó e hirió varias veces a Bueno en el pecho con armas punzocortantes.

Froylán Carlos Cruz recordó que apenas el pasado lunes se realizó una reunión del gabinete de seguridad pública de Zacatecas, donde se analizó el incremento de la violencia y los homicidios en la entidad, particularmente contra mujeres supuestamente involucradas con el crimen organizado.

Admitió que se está analizando un cambio de estrategia de combate a las organizaciones criminales para de inmediato ponerla en práctica, pues sabemos que la inseguridad que se ha incrementado, y lo más preocupante es el tema de las mujeres.

En este contexto, una taxista fue asesinada en el municipio de Guadalupe, Zacatecas, por un comando, y un hombre no identificado fue ultimado en la ciudad de Fresnillo, reportaron autoridades policiacas.