Setenta y cinco años después del ataque japonés a la base naval de Pearl Harbor, que precipitó la participación de Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial, el presidente Barack Obama y el primer ministro Shinzo Abe saldaron este martes en ese sitio la reconciliación entre dos países que ahora son socios y aliados. La visita de ambos jefes de Estado al USS Arizona, estructura blanca suspendida sobre los restos del barco con ese nombre destruido en el ataque a Hawai, fue un nuevo paso en la revisión histórica que ambos empezaron en mayo pasado, en Hiroshima. El gobernante japonés no ofreció perdón, como tampoco lo hizo su par estadunidense durante su visita al memorial de las víctimas del ataque nuclear. En la imagen, saludan a veteranos de ese conflicto bélico. Foto Afp