Victoria de los que luchan contra el terrorismo
, dice Al Assad
Viernes 23 de diciembre de 2016, p. 21
Alepo.
La ciudad de Alepo está totalmente liberada de los rebeldes y bajo el control de las fuerzas del presidente sirio, Basar Al Assad, al concluir este jueves el desalojo de la ciudad, informó un mando del ejército, lo que marca la mayor victoria del gobierno contra los insurgentes desde que empezó la guerra civil en Siria, en 2011.
Los últimos combatientes y civiles que quedaban en los barrios insurgentes de Alepo salieron de la ciudad la noche de este jueves en medio de un gélido clima invernal, informaron medios leales al gobierno y el opositor Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
El estado mayor de las fuerzas armadas anuncia el retorno de la seguridad en Alepo tras su liberación del terrorismo
, comunicó el ejército en un texto.
Esta victoria representa un giro estratégico, subraya la capacidad del ejército sirio y sus aliados para ganar la batalla contra los grupos terroristas y plantea las bases de una nueva fase para sacar al terrorismo de todo el territorio de la República Árabe Siria
, agregó.
Al Assad explicó que la victoria de las tropas es también la de todos los que apoyan la lucha contra el terrorismo
, y mencionó explícitamente a sus estrechos aliados Rusia e Irán. Los éxitos en el campo de batalla son un paso fundamental en el camino para acabar con el terrorismo en todo el territorio sirio y crear las condiciones adecuadas para una solución destinada a poner fin a la guerra
, añadió.
Al perder su bastión, la rebelión experimenta su peor derrota. Yasser al Yussef, responsable de la oficina política del grupo rebelde Nurredin al Zink, estimó que fue una gran pérdida
para los insurgentes. Para la revolución es un periodo de retirada y un giro difícil
declaró.
Con esta victoria, el régimen controla ahora las cinco principales ciudades: Alepo, Homs, Hama, Damasco y Lattaquié.
Según la Organización de Naciones Unidas, desde el inicio de la evacuación de Alepo, la semana pasada, unas 35 mil personas abandonaron la ciudad, pero el OSDH habla de 27 mil, de ellas 7 mil combatientes.
A cambio de la evacuación de Alepo, unos mil civiles pudieron salir de Fua y Kafraya, localidades sitiadas por rebeldes en Idlib, con lo que se cumple una exigencia de las milicias chiítas.
El 15 de noviembre, con apoyo aéreo ruso, Siria inició una ofensiva en Alepo que hasta el 15 de diciembre costó la vida a más de 465 civiles, de ellos 62 niños, según el OSDH. Los bombardeos rebeldes también mataron a 142 civiles, entre ellos 42 menores.
Al final de la operación, un acuerdo apadrinado por Rusia, Irán y Turquía, que apoya a la rebelión, permitió el traslado de civiles y rebeldes. Muchos de los evacuados fueron a Idlib, que podría convertirse en el próximo Alepo
, según Staffan de Mistura, enviado especial de la ONU para Siria. Advirtió que el cese de las hostilidades en todo el país es vital para evitar otra batalla sangrienta.
En Irak, unas 34 personas, entre ellas civiles y trabajadores humanitarios, murieron en tres atentados simultáneos perpetrados con coches bombas en Mosul.