La flor de nochebuena, ícono de la temporada navideña, dejará una derrama de 477.3 millones de pesos a los agricultores de Morelos, Michoacán, Ciudad de México, Puebla, Jalisco y estado de México, principales productores de la también llamada pastora.

Este año, según datos de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), la producción fue de poco más de 16 millones de plantas, las cuales se cosecharon en 246 hectáreas.

Los principales estados productores fueron Morelos, con 5.7 millones de plantas; Michoacán, 4 millones; Ciudad de México, 3.1 millones; Puebla, 1.5; Jalisco, 1.3 millones, y estado de México, con casi 900 mil plantas. En su cultivo participan dos mil productores, genera más de 3 mil empleos directos y cerca de 9 mil indirectos.

Este año los precios de la planta en la Ciudad de México se incrementaron entre 12 y 15 por ciento en comparación con 2015. La maceta de cinco pulgadas subió tres pesos; la de seis pulgadas, 10 pesos, y la de siete pulgadas ocho pesos.

En el mercado local se encuentran 40 variedades de la nochebuena o cuetlaxóchitl –en náhuatl–, la cual es originaria del corredor chichinautzin. Moctezuma la tenía en su jardín botánico de Oaxtepec. México continúa ocupando el sitio 14 como exportador de dicha flor, ya que en el ámbito internacional se comercializan más de 500 millones de plantas.

Este año, los productores ornamentales de Morelos lograron un nuevo récord Guinness con la conformación del tapete floral más grande del mundo, al agrupar 127 mil plantas de nochebuena en 14 mil 200 metros cuadrados con el diseño de la imagen gigante de la flor. De esta manera arrancaron dicho récord a los productores de Kiev, Ucrania, quienes en agosto de este año elaboraron un tapete floral en 13 mil metros cuadrados.

Además, este año el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap) entregó las primeras variedades mexicanas de nochebuena, cuyo registro comercial está en trámite, pues cabe recordar que las variedades existentes en el mercado nacional –hot pink, prestige red, orange spice, orion red, polar bear, Da Vinci, freedom red, nutcraker white, Monet, mármol, maren, marble star, sonora white, entre otras– son de importación.

Otra tradición de la temporada es el consumo de los romeritos, cuya mayor producción se concentra en el área rural que subsiste en la Ciudad de México. Para este fin de año se cosecharon 3 mil 500 toneladas.

En Tláhuac y Xochimilco se destinaron 586 y 31 hectáreas respectivamente, al cultivo del alimento. De acuerdo con la Secretaría de Desarrollo Rural y Equidad para las Comunidades (Sederec), el valor de la producción fue de 19.2 millones de pesos, en beneficio de 580 agricultores de los pueblos de San Andrés Mixquic, San Nicolás Tetelco y San Juan Ixtayoapan, en Tláhuac, y de San Gregorio Atlapulco, en Xochimilco.

El volumen de producción fue menor en 900 toneladas con respecto al año pasado, pero el valor fue superior en 1.2 millones de pesos, de acuerdo con datos de Sagarpa y Sederec.

Cada productor recibió un pago de cinco pesos por kilogramo, pues le pagaron 200 pesos por un saco de 40 kilos, mientras que el consumidor desembolsa 110 pesos por un kilogramo del quelite en los supermercados.