Riesgo de que suban intereses de tarjetas, préstamos
Televisa cae del primer lugar en noticiarios
Agandalle
Ayotzinapa llega al Zócalo
Señalamientos contra EPN
Las últimas consecuencias
Sanción temporal
a Duarte
Uber y la revuelta de taxistas
Gasto: recorte y corrupción
Austeridad de a mentiras
Gobierno anima desigualdad
Usar el morbo
Maíz en Pichátaro
espués de cuatro años de un proceso de negociación arduo, difícil y por momentos sumamente frágil, el gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) concretaron ayer un acuerdo de paz de aliento histórico para poner fin al conflicto armado más antiguo del continente. El documento fue firmado en Cartagena de Indias, en presencia de mandatarios y personalidades destacadas de la comunidad internacional, por el presidente Juan Manuel Santos y el máximo dirigente de la organización guerrillera, Rodrigo Londoño, alias Timochenko.
Indignación por despidos en Pemex
ras conocerse la noticia de que Pactan Pemex y su sindicato el despido de miles de trabajadores
(La Jornada, 26/9/16), no puede dejar de subrayarse que se trata de una acción increíblemente estúpida del gobierno, cuando hay millones de mexicanos sin trabajo. Y no es todo: los despidos son en áreas de extracción de petróleo ya exploradas –por algo son de extracción–, regalando el costo de la exploración a los ganadores de las licitaciones.
i no encontramos verdades que vale la pena decir, es mejor el silencio, pues la domesticación de la gente es resultado, entre otras cosas, del aturdimiento con miles de verdades intrascendentes, como bien advirtió Bertolt Brecht. La manipulación y la enajenación se alimentan, por supuesto, de las mentiras (simulaciones, medias verdades o francas falsedades y engaños) diseminadas por el poder con una falta total de ética, pero de allí ninguna otra cosa pude esperarse. Desarrollar un pensamiento crítico, analítico, lógico, con criterio ético, con apego a la verdad (por medio de la escuela, la universidad, el periodismo o los medios
), presupone un esfuerzo por encontrar verdades que vale la pena decir, so pena de contribuir a la confusión, la desorientación, la distracción, la diversión.
a península de Yucatán es una plataforma caliza sin aguas superficiales pero con una red de ríos subterráneos, donde siguen resonando los ecos de una civilización de 3 mil 500 años de antigüedad que se niega a morir, y que hoy subsiste, persiste y resiste cubierta por un extenso manto de vegetación tropical. Son los mayas, su memoria y sus selvas que contra todo vaticinio incrementan su población y mantienen redes secretas de resistencia basados en sus creencias, saberes y prácticas y en una sólida capacidad para no olvidar. Se trata de una resistencia biocultural, donde selva y cultura forman una mancuerna solidaria, una alianza que es recíproca y cuyos recuerdos trabajan como los designios para visualizar y construir un futuro diferente. El renacimiento demográfico, que alcanzó más de 1.5 millones en 2010 y que según el Inegi (conteo de 2015) hace que dos de cada tres habitantes del estado de Yucatán sean mayas, es poco visible ante las explosiones urbanas, obscenas y espectaculares, de dos ciudades: Mérida y Cancún. Estos dos centros se han convertido en los arietes de una urbanización desbocada, donde la especulación inmobiliaria, el comercio y los servicios las han convertido en polos notables del turismo nacional e internacional. Estas dos ciudades continúan perpetuando un vicio histórico: por un lado vanaglorian a la civilización maya del pasado, mediante el uso y mal uso de sitios arqueológicos, escenarios naturales, sucesos históricos, parques temáticos, estelas y códices, y por el otro siguen alimentando una sociedad que margina, discrimina y explota a los mayas actuales. Para las minorías que dominan esa porción del territorio mexicano los mayas de hoy existen como una sociedad carente de pasado, disociada de los gloriosos tiempos de la civilización antigua, considerados como sombras fantasmales, como formas degradadas o degeneradas de un pasado que se idealiza como magnificente.
a foto desgarradora –pese a ser un performance– de la primera plana del pasado sábado en nuestro periódico me impulsó a escribir este artículo. Las situaciones de desigualdad, discriminación y de violencia contra las mujeres son un hecho tan aterrador como desconocido en el mundo. Con seguridad nadie ha hecho la relación completa de las situaciones de desigualdad, discriminación y violencia contra las mujeres. La generación de información detallada sobre los patrones y la dinámica de esa violencia es crucial para una comprensión más completa de sus causas y consecuencias, y para el diseño de estrategias eficaces de prevención y abolición de la misma. Y cada situación, cada acto de discriminación, cada hecho de violencia debiera contar con una definición, con una sanción moral, o legal civil o penal, según el caso. Que la forma en que los varones ven y tratan a las mujeres es un constructo social, parecen admitirlo todos los seres pensantes, pero ¿qué hemos hecho, qué hacemos, para cambiar de raíz esa aberrante atrocidad? Lo muy poco que se hace, lo hacen las propias mujeres, se diría que acompañadas con la más simiesca indiferencia de los varones.
oña Delfina de la Cruz Santiago es madre de Adán Abraham de la Cruz, uno de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecido hace dos años. A finales de marzo de este año, recibió una llamada telefónica de un enviado del gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo. El funcionario le ofreció dinero para que abandonara la lucha por la presentación con vida de su hijo. Ella le dijo que no.
n un hecho sin precedente, la prestigiada revista científica Science incluyó ayer en la página principal de su sitio web un video en el que se rechaza la versión de las autoridades mexicanas sobre la suerte de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa, según la cual los jóvenes fueron asesinados y sus cuerpos reducidos a cenizas en el basurero de Cocula. En la proyección, que tiene una duración de 1.52 minutos, se sostiene, por el contrario, que a partir de un experimento reciente realizado por el doctor José Luis Torero y sus colaboradores en la Universidad de Queensland, en Australia, esta versión es imposible, y una vez descartado el basurero de Cocula los investigadores deberán seguir buscando en otro lugar. Hasta donde recuerdo es la primera vez que ocurre algo así en la publicación que edita la American Association for the Advancement of Science, tratándose de un tema concerniente a nuestro país, y revela la gran preocupación que existe en la comunidad científica internacional por el esclarecimiento cabal de estos hechos.