Texcoco, Méx.

Ejidatarios de Tocuila integrantes del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra (FPDT) exigieron la destitución del presidente del comisiariado ejidal, Humberto Lizalde, a quien acusan de haber encabezado a un grupo de golpeadores que desalojaron a los campesinos opositores a las obras del nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (Naicm) el fin de semana.

Aseguraron que la Procuraduría Agraria (PA) ha amenazado a varios campesinos con dejar encerrada su fracción ejidal e impedirles pasar a sus tierras por negarse a venderlas para la construcción de la autopista Pirámides-Texcoco.

Al comisario lo protege la Procuraduría Agraria y juntos defienden a las empresas Lince y Cypsa Vise (constructoras de la autopista). (Lizalde) se ha vendido y actúa arbitrariamente contra el núcleo ejidal. Lo peor es que encabezó golpeadores para desalojarnos, manifestaron.

Anunciaron que convocarán a una asamblea para promover la destitución de Humberto Lizalde. Sólo así podremos quitarlo.

Tocuila tiene 506 ejidatarios. En su más reciente asamblea, unos 150 se manifestaron en favor de la venta de tierras. El pasado 15 de junio la Secretaría de Comunicaciones y Transportes entregó a Humberto Elizalde dos cheques (números 19305 y 19307) por un total de 3 millones 300 mil pesos para autorizar la enajenación de los predios.

Sin embargo, los campesinos que se oponen cuentan con el amparo 349-2016-II que les otorgó el juez noveno de distrito, Jorge Cristóbal Arrendondo Gallegos.

Los ejidatarios de Tocuila instalaron ayer una mesa de información en la plaza principal del poblado para enterar a la comunidad de las agresiones que sufrieron el pasado viernes.

El 19 de agosto pasado un grupo de golpeadores armados con palos, piedras y tubos presuntamente contratados por las empresas Lince y Cipsa Vise agredieron a campesinos del FPDT de Texcoco y San Salvador Atenco para desalojar su plantón en el ejido de Tocuila.

La construcción de la carretera continuó el fin de semana. El FPDT responsabilizó al gobierno federal de la integridad física de sus integrantes.