Río de Janeiro.

La Agencia Mundial Antidopaje (AMA) necesita restaurar su reputación, dijeron funcionarios del Comité Olímpico Internacional (COI), en medio de una guerra verbal sobre la respuesta del organismo ante el escándalo de dopaje de Rusia.

La AMA ya había sido criticada por miembros del COI por su actuación frente a las acusaciones de consumo sistemático de sustancias prohibidas en ese país, cuando el tema se hizo público a través de los medios de comunicación el año pasado.

En este contexto, el presidente del COI, Thomas Bach, inauguró la asamblea general del organismo, en la que busca el respaldo de los miembros para manejar el escándalo de dopaje en Rusia.

Bach culpó a la AMA de no actuar con presteza sobre esas evidencia y dijo que estaría mal hacer daño colateral a deportistas (inocentes) por las malas acciones de su gobierno.

“Ese cínico enfoque no se ajusta al espíritu del movimiento olímpico. Por tanto, no es aceptable insinuar que cualquiera que no comparte sus opiniones no combate el dopaje. La justicia natural no nos permite privar a un ser humano del derecho de probar su inocencia. Por eso la junta ejecutiva del COI otorgó ese derecho a deportistas rusos, dijo Bach.

En tanto, los nadadores rusos Vladimir Morozov y Nikita Lobintsev podrían competir en Río, pues apelaron ante el Tribunal Arbitral del Deporte de su exclusión de los juegos y la Federación Internacional de Natación reconsideró levantarles la suspensión.

Ante las descalificaciones de atletas dopados en anteriores Juegos Olímpicos, el COI admitió que no tiene un protocolo para reasignar las medallas.