Durante los comicios efectuados en junio pasado en 14 entidades del país, los partidos políticos y los candidatos independientes gastaron poco más de mil 500 millones de pesos en realizar proselitismo electoral, según datos de la Comisión de Fiscalización del Instituto Nacional Electoral (INE). De ellos, casi 90 por ciento correspondió al financiamiento público, obtenido mediante las prerrogativas, y 203 millones de pesos provinieron de aportaciones privadas.

En un concentrado de información sobre los ingresos y gastos que los actores políticos registraron para las elecciones, la comisión refirió que los partidos políticos y las coaliciones nacionales reportaron haber tenido ingresos de origen privado por un total de 122.2 millones de pesos; los partidos políticos y alianzas locales captaron 8.5 millones de pesos, en tanto que los aspirantes independientes consiguieron financiamiento privado por un total de 72.6 millones de pesos.

Asimetría

Se observa clara asimetría en el origen de las fuentes de financiamiento respecto de cada sujeto obligado. Así, mientras los partidos políticos y sus coaliciones financian sus campañas con recursos de origen público en 91 por ciento, los candidatos independientes realizan sus actividades de campaña con recursos públicos que equivalen a 24 por ciento de los recursos totales que reciben, y el 76 por ciento restante corresponde a recursos de origen privado, concluye la Comisión de Fiscalización.

En otro rubro, se hace referencia a que el Sistema Integral de Fiscalización captó 91 mil 185 operaciones reportadas por partidos, coaliciones y candidatos independientes, de las cuales 53 mil 12, es decir, 58 por ciento del total, se efectuaron en la semana anterior a la finalización del plazo legal, el 4 de junio. En ese lapso, los candidatos pasaron de haber reportado, en promedio, 48 por ciento de sus operaciones a 95 por ciento, en tan sólo siete días.

Más aún, en la respuesta al oficio de errores y omisiones, entre el 15 y el 19 de junio, los sujetos obligados cargaron 27 mil 962 operaciones más, un 31 por ciento adicional. Llegamos así a un gran total de 122 mil 938 operaciones.

El documento añade que el informe final de campaña debió haber sido reportado por 8 mil 271 aspirantes, pero sólo cumplieron en tiempo y forma 86.4 por ciento y 8.7 por ciento lo entregó fuera de los plazos legales. En tanto, 4.8 por ciento, esto es, 400 candidatos, omitieron reportar sus gastos efectuados durante la campaña.

Por lo que hace al capítulo del destino del gasto, el INE informa que casi la mitad de los mil 500 millones de pesos, es decir, 725 millones, se canalizaron a gastos de propaganda genérica y utilitaria; 407 millones de pesos se destinaron a gastos operativos y financieros; 220 millones de pesos se fueron al financiamiento de propaganda en vía pública y 51 millones de pesos, para financiar la propaganda en Internet, entre otros rubros.