Integrantes de la Segunda Brigada Nacional de Familias en Búsqueda de Personas Desaparecidas inspeccionó la laguna de Cerro Azul, en el municipio de Paso del Macho, en la zona centro de la entidad.

Después de dos días de retraso, en espera de que el gobierno federal trajera equipo especial (que nunca llegó) para realizar inmersiones y resguardar la integridad de los buscadores, los brigadistas iniciaron la exploración de los cuerpos de agua.

Este lunes, auxiliados con una cuerda y utilizando dos cámaras de llanta que usaron de balsa, los brigadistas se adentraron en la laguna de Cerro Azul, donde el crimen organizado habría arrojado restos humanos calcinados, de acuerdo con testigos anónimos.

Luego de varias horas, encontraron objetos quemados a altas temperaturas, los cuales guardaron en bolsas de plástico y entregaron a las autoridades para su estudio.

Juan Carlos Herrera Trujillo, de la Red de Enlaces Nacionales e integrante de la brigada, mencionó que, a diferencia de Amatlán de los Reyes, donde transcurrió la primera parte de la Segunda Brigada, Paso del Macho es un municipio hostil para los buscadores.

Sostuvo que se percibe temor y desconfianza de los ciudadanos, quienes se resisten a participar en la búsqueda por temor a represalias. En Amatlán hubo más información; en Paso del Macho hace falta más trabajo social. Cada zona tiene sus rasgos distintivos, y estamos trabajando para recomponer el tejido social. Confiamos en que pronto podamos tener resultados, dijo.