Houston.

Argentina y Lionel Messi buscarán este martes en el NRG Stadium un lugar en la final de la Copa América Centenario ante el anfitrión Estados Unidos, en el que parten como grandes favoritos. No obstante, el equipo de las barras y las estrellas se crece, y su técnico Jürgen Klinsmann, tras celebrar a sus jugadores por haber llegado a semifinales, exige: Ahora hay que ir por más.

Todo es posible en los partidos a eliminación directa. Estás 50 y 50 contra cualquiera que juegues. ¿Por qué no soñar en grande? Se trata de dos partidos más, machacó Klinsmann en las últimas horas en su discurso motivacional. Les dije a los jugadores que este es un momento especial, es una oportunidad única en la vida, agrega.

Estados Unidos disputa por segunda vez las semifinales de una Copa América, un torneo en el que ha participado cuatro veces como invitado de la Conmebol, y la afición local centra sus esperanzas en el vaquero Clint Dempsey, que lleva tres goles y tres asistencias.

Más allá de que el cuadro local se presentará con mayor descanso, Argentina llega a la semifinal en estado de gracia, con un Lionel Messi en plan demoledor y relativamente fresco, después de sumar apenas 75 minutos en cancha en la fase de grupos mientras se recuperaba de una lesión de espalda.

Hay que seguir de esta manera, apuntó Messi, Estados Unidos es un rival muy duro, muy fuerte físicamente, que si lo dejas jugar lo hace muy bien, sostuvo.

Si el historial general es muy favorable al equipo dirigido por Gerardo Martino con cinco victorias, dos empates y dos derrotas, en la Copa América están igualados con un triunfo por bando.