Monterrey, NL.

Desolada por el abstencionismo registrado en las pasadas elecciones, la escritora Elena Poniatowska se muestra preocupada por el futuro de México: Siempre es mejor votar; o lo hacemos o México se va al diablo.

La autora de La noche de Tlatelolco visitó esta ciudad para la inauguración de la cátedra de periodismo que lleva su nombre en la Universidad Autónoma de Nuevo León, y en entrevista con La Jornada dijo sentirse realmente sorprendida del nivel de ausentismo que vio al acudir a votar en la Ciudad de México.

No había nadie. Y no había nadie porque ya nadie cree. Además, los partidos políticos sobran. Les tengo un horror a los partidos, es dinero tirado a la basura. Se gasta una millonada, sin resultados, comentó.

En la Ciudad de México, el proceso electoral para elegir a los integrantes de la Asamblea Constituyente costó 490 millones pesos, pero a pesar del gasto, sólo acudió a votar 28 por ciento del padrón electoral. Y, según el Instituto Nacional Electoral, se entregan más de 10 millones de pesos a cada partido.

“Estas elecciones fueron la derrota total. La derrota de la política mexicana se patentiza en los pasados comicios, es la demostración de que no funcionan los partidos, de que el dinero que se les da es inútil, de que nuestro sistema es caro y no funciona. Ese dinero se podría dedicar a hacer escuelas, hospitales, carreteras…”

Añadió: Nuestras elecciones nos salen carísimas y el sistema de conteo rápido sigue sin funcionar. Siempre quieren imitar a los gringos en todo, porque ésta es una imitación. No está en nuestro carácter, no se parece a nosotros. Y no tenemos con qué imitar su democracia o lo que creemos que es democracia.

La derrota de Peña Nieto

Poniatowska reconoció que hay desánimo de los mexicanos para acudir a votar, porque el sistema del INE aún no otorga la certeza de limpieza. La gente no va a votar porque no cree; siente que la engañan, que sigue habiendo fraude y que nunca sale por el que ellos votan, entonces para qué van a sufragar, por eso no acuden.

Consideró que la derrota del PRI, que perdió siete de las 12 gubernaturas en juego, es una derrota también para el presidente Enrique Peña Nieto, particularmente por los malos resultados de su gobierno:

El sexenio de Peña Nieto está marcado por el crimen de Ayotzinapa, por el avance de la drogadicción, por la guerra contra las drogas... de veras, es un sexenio que antes de terminar ya se fue al caño.

Criticó las reformas de Peña Nieto en materias educativa y energética: son para vender al país, para regalarlo, para que nosotros perdamos México. Lo del petróleo es tremendo. Si resucitara Heberto Castillo, que tanto luchó por el petróleo, ¿qué diría?

Agregó: Lázaro Cárdenas, quien hizo todo por este país, qué pensaría. Recuerdo cómo los mexicanos le llevaban a doña Amalia Solórzano una gallinita a Bellas Artes; la gente se quitaba sus anillos para pagar la deuda petrolera. Todo eso es como si no hubiera existido, es echar al país para atrás y dañarlo terriblemente.

Para la escritora galardonada con el premio Cervantes de Literatura, México vive una de sus peores épocas: “vivimos una época oscura. Empezó a raíz de las devaluaciones; todos los mexicanos que se iban del país y se instalaban en Estados Unidos para que allá nacieran sus hijos y tuvieran la nacionalidad estadunidense. Y ahora es igual.

El gobierno de Peña Nieto está convirtiendo a México en un país de segundones y de criados de Estados Unidos.

–¿Cómo va a pasar Enrique Peña Nieto a la historia?

–Va a pasar como un muñequito bonito, con su copetito, de esos muñequitos que tienen una bola abajo y que les explota. Nunca le he oído ninguna declaración memorable. No recuerdo una frase de Peña Nieto; de Zedillo recuerdo que decía “no traigo cash”, o de Fox con todas esas cosas que no las podías creer, como lo de Borgues… la cultura de los presidentes es realmente apabullante.

La escritora Elena Poniatowska, quien acudió a la Universidad Autónoma de Nuevo León para inaugurar la cátedra de periodismo que lleva su nombre, afirmó que el INE no ha podido otorgar la certeza de limpiezaFoto Sanjuana Martínez

La derrota del PRI, indicó, tiene que ver con el mal gobierno de Peña Nieto y su escasa preparación: “Él mismo se delata en su ignorancia; el hecho de que ni siquiera ha leído tres libros. El hecho de esconderse en un baño cuando fue a la Ibero y de tener un futuro presidente de la República metido en un excusado para que nadie lo fuera a buscar ni le dijera nada. Incluso, si él hubiera dicho ‘aquí estoy’, hubiera sido mejor. Desde que era candidato empezó mal”.

Poniatowska comentó que este gobierno odia la verdad, por eso asesinan a tantos periodistas, porque hay una simulación en la política, donde todo mundo simula ser una cosa, cuando es otra. Todo es una traición, es una basura. El gobierno odia todo lo que puede delatarlo. Para el gobierno, los periodistas somos delatores.

Pocas opciones

El panorama político resulta desolador para Elena Poniatowska, sobre todo por la situación en que se encuentra la izquierda mexicana, que en las pasadas elecciones hizo alianza con el PAN y juntos ganaron varios estados.

“El PRD y Morena están siempre peleando. Cuauhtémoc Cárdenas se salió por completo del partido del sol azteca, y qué peor condena de alguien que fue dirigente, un hombre que se fue como diciendo: ‘ahí les dejo su basura’”.

–¿En que se ha convertido el PRD?

–Pues en eso. Siempre hay alguien en ese partido que busca su beneficio y no el de todos. Allí está Jesús Ortega, que es un tramposo en todo, desde su vida personal hasta su vida pública.

Añadió: la izquierda siempre ha estado satanizada, desde los ferrocarrileros que les rompían todo. Pero la izquierda ha cometido siempre el error gravísimo de estar siempre dividida. Las mujeres sí hemos sabido apoyarnos y no destruirnos; nos podemos criticar, pero entre nosotras hay solidaridad; entre ellos no.

–Entonces, ¿cuál es la solución?

–Lo único que nos puede salvar es un cambio enorme de gobierno. Y también la participación de los jóvenes. A través de las redes sociales todos se comunicaron y hubo las grandes marchas por los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos. Se supo al llegar al Zócalo quiénes fueron los provocadores. Eso sí fue una esperanza.

Para Poniatowska, el presidente de Morena, Andrés Manuel López Obrador, representa una de las pocas opciones viables para el 2018.

Andrés Manuel tiene la feroz convicción de qué es ser presidente; tiene una fe en sí mismo impresionante y, en primer lugar, es el único que conoce al país.

–¿Cómo serán las elecciones de 2018?

–Con varias figuras. Primero con la figura grande de Andrés López Obrador y luego los candidatos independientes, como Juan Ramón de la Fuente, la de Miguel Ángel Osorio Chong en el PRI o Margarita Zavala en el PAN, que tiene la piedra en el zapato, y no se la va a quitar, de su marido Felipe Calderón.

“Ojalá y haya un poco de entusiasmo, porque lo horrible es que suceda lo del domingo 5 de junio, que nadie fue a votar, como diciendo ‘ya que a México se lo lleve, que se vaya al diablo’. Pero votamos o a México se lo lleva el diablo. No creer es peor.

“Yo fui a votar y le dije a mi hijo Mane, que es científico y se iba de viaje: ‘Por favor, antes de tomar el avión, vas a ir a votar’, y me dijo: ‘sí mamá, sí’… Siempre es mejor votar”, concluyó.