Lens.

Con gol madrugador encajado por una mala salida de su portero y la expulsión de su capitán tras acumular dos tarjetas amarillas en el primer tiempo, Albania pagó caro su ingenuidad en su estreno en una Eurocopa, al sucumbir 1-0 ante Suiza.

Un cabezazo de Fabian Schaer a los cinco minutos de iniciado el partido estableció la diferencia en el partido del grupo A, en el estadio Bollaert-Delelis de Lens.

Schaer se elevó para cabecear al fondo un tiro de esquina ejecutado por Xherdan Shaqiri. El solitario gol helvético contó con la complicidad del arquero albanés Etrit Berisha, titubeante en su salida para despejar el balón.

Los suizos pudieron haber ganado con un marcador más amplio, pero fueron demasiado cautelosos en los últimos minutos. En cambio, su arquero Yann Sommer tuvo una intervención providencial para ahogar el grito de gol al atacante Shkelzen Gashi.

No fue el único acto de inocencia de Albania, uno de los cinco equipos que en esta edición disputan su primera Eurocopa. Se quedó con 10 elementos cuando su capitán Lorik Cana fue expulsado al minuto 37, inferioridad numérica que los suizos desperdiciaron.

Cana bajó un balón con la mano para coartar la ocasión de gol al delantero helvético Haris Seferovic, 14 minutos después de que el árbitro español lo amonestó por una fuerte entrada a destiempo sobre Blerim Dzemaili.

No tenía miedo de que íbamos a dejar escapar el triunfo, pero debimos haber marcado más goles, declaró el técnico suizo, Vladimir Petkovic.

El partido tuvo un hecho inédito en la historia del torneo europeo, al enfrentar a un par de hermanos de origen kosovar en bandos opuestos. Taulant Xhaka representó a Albania, mientras Granit Xhaka lo hizo por Suiza.

La actividad en el grupo comenzó el pasado viernes con la victoria 2-1 del anfitrión Francia ante Rumania.

En la segunda fecha de la llave los suizos enfrentarán a los rumanos, el miércoles en París, mientras Albania se medirá con los galos, en Marsella.